Dirigida por Joe Wrigth, la película parece un refrito de géneros, desde el drama, la acción, un toque de comedia, y otro de ciencia ficción. Esto podría haber salido muy mal, o como yo lo veo, muy bien, pues es una propuesta original, y con unos personajes, más que interesantes.
La película, puede contar con algún fallo de guión, pero que a mi parecer, son bastante salvables, y no impiden que disfrutes del conjunto de la película. Además como he dicho antes, se me antoja como una propuesta de lo más original que he visto últimamente, empezando por la historia del padre y la hija, y pasando por los ricos personajes que pueblan la película. El más raro de ellos, es el asesino gay y nazi (Tom Hollander), que hasta tiene aires en cierto momento de la película de recordarnos a La naranja mecánica. Pero también esta Cate Blanchet, una enigmática agente de la CIA, que parece la responsable de todo lo que acontece, y que con su piel blanca, desconcierta, y además parece ser que es lo que pretendía.
También hay que destacar la banda sonora, obra de los Chemichal Brothers, y que te meten de lleno en las escenas de acción.Así como la preciosa fotografía que acompaña a toda la película, que refleja perfectamente los bellos paisajes donde se desarrolla la película. Por cierto, para mi la mejor escena de la película, es el tramo final, desarrollado en ese parque de atracciones abandonado, y que la fotografía, tan bien ha sabido reflejar.