Aunque haya grupos que despotriquen la música versionando horriblemente, escuchar a Richie Havens cantar el Here comes the sun es uno de los pocos placeres que te pueden llegar a dar la música en esta vida, o escucharla bella voz de Alynda Lee Segarra (Hurray for the riff raff) entonando la mítica "My sweet lord".
Sin duda es un disco para poder disfrutar en todos sus sonidos y estilos musicales, causa que le llegaría de gozo al propio Harrison, ya que el siempre busco la libertad musical. No tener que encasillarse, sino el poder expresar sus poemas libremente. En ese aspecto, aquí lo han conseguido.