Tomemos, de manera textual, las palabras del diputado Opositor venezolano, Miguel Pizarro, ante la situación de las últimas horas en Venezuela: » Para salir de ésto, hacen falta 3 componentes: el pueblo, el mundo y Las Fuerzas Armadas. Ya tenemos 2 y nos hace falta una»; en clara alusión al ejército. Es triste observar como la mayoría de la población, oprimida y sufrida, por este detestable gobierno parásito, se ha manifestado en las calles ,de manera constante y masiva; armado, simplemente con su voz, sus gritos, sus pancartas y, a lo sumo, con piedras, palos y bombas molotov, con el único objetivo de sacar al tirano del poder, y, lastimosamente, las Fuerzas Armadas, vendidas y » lemeculo» de Maduro , «les dan las espaldas, y no los apoyan en esta lucha tan justa y necesaria. ¿Quién sabe los privilegios que el dictador ha dado al ejército que ha sido de capaz de comprar sus voluntades y que los uniformados actúen como el mayor Judas del pueblo?. ¿Que acaso los miembros del Ejército son seres tan «descerebrados» que no son capaces de analizar que están defendiendo a un individuo narcisista, demagogo, megalómano, aprendiz de Hitler y que, al igual que el famoso trasatlántico » Titanic», llevará al hundimiento total de Venezuela y que cuando eso suceda, él y sus secuaces, al igual que las ratas, serán los primeros en abandonar el barco; dejando a la mayoría de la población, humilde y trabajadora, sumida en el mayor caos y desesperanza. ¡ Señores de uniforme, por el amor de DIOS, recapaciten y cambien sus posturas; están traicionando a sus compatriotas, a sus hermanos de sangre, a la gente que forma la base económica y social en Venezuela, a su pilar más importante y determinante. En los últimos dos días, se ha escuchado un llamado, por parte del Presidente de la Asamblea, el opositor Juan Guaidó, a aumentar las protestas en las calles y a desafiar a las esbirras fuerzas del ejército que apoyan al asno de Maduro, con la enorme desventaja que estos hombres comprados, mal llamados defensores del pueblo y la soberanía, poseen tanquetas, armas de fuego y de perdigones y gases lacrimógenos ; haciendo esta lucha muy desigual e imposible de ganar para la oposición. La única salida a esta crisis, debería ser el diálogo y la concertación; pero Maduro es una persona con la que no se puede dialogar, porque él y su partido ya se enquistaron en el poder de Venezuela, para seguir robando y hacerse más poderosos y más ricos. La intervención militar, de Los Estados Unidos, no la veo factible, pues detrás de Maduro y su séquito odioso, está Rusia, que le apoyaría si el gobierno de Trump decide hacer una intervención militar. La única solución, como afirma el Diputado Pizarro, es que el ejército recapacite y defienda a aquellos que abanderan una lucha justa, que es el pueblo venezolano. DIOS quiera, que en sus corazones, corrompidos por el dinero y los privilegios dados por el dictador, aún quede un poco de raciocinio y humanidad.