La verdad es que estoy encantada con ambas cosas. El estampador es una maravilla, recoge los sellos muy bien y los aplica en la uña perfectamente. Al tener una almohadilla grande y otra pequeña permite seleccionar la más adecuada según el diseño que se vaya a estampar y al ser transparente puedes ver perfectamente como y donde aplicar el sello y así asegurarnos de que lo aplicamos justamente donde queremos. Ambas almohadillas van con su tapa por lo que están protegidas y evitamos que se ensucien, rayen o llenen de pelusilla.
Por otro lado este tapete de silicona, viene en un tubo para mantenerlo siempre en perfectas condiciones. No es muy grande pero suficiente para lo que yo le voy a dar uso. Tiene dos lados uno con el diseño claro y otro oscuro según el tipo de esmaltes que vayamos a usar, para mi es perfecto y estoy deseando estrenarlo.
¿Qué os ha parecido? ¿tenéis un estampador de este estilo? ¿qué os parecen este tipo de tapetes?
Un beso y os veo en mi siguiente post.