“Hay discursos de gente con pocos cursos”. El ministro de Educación envía una carta con errores gramaticales.

Publicado el 25 abril 2012 por El Tridente

Imagen: abc.es

Esta semana se celebraba el Día Internacional del Libro el pasado lunes, ¿lo recuerdan verdad? Sobre todo porque lo habrán leído en algún sitio. Bueno, pues actos como estos siempre cuentan con personalidades del mundo de la cultura que hacen que el día sea mucho más importante si cabe. Aunque también encontramos personas relacionadas con la cultura que también hacen que el día no se recuerde por sus acertados discursos.

Tal ha sido el caso del ministro de Cultura Ignacio Wert. Sí, ese que le ha subido las tasas a los universitarios y que además ha propuesto que las aulas se masifiquen mucho más para ahorrar en profesores. Pues el citado responsable de cultura del Gobierno de la Nación hizo pública el pasado lunes y con motivo de un día tan importante para su ministerio, una carta. Y seguro que estarán pensando que el contenido no era el idóneo o algo parecido. Pues no, el contenido sí tenía que ver con lo que se estaba tratando, lo que estaba mal era que esa carta tenía varios errores gramaticales.

Y como nosotros no estamos aquí para hacer papel reciclado del discurso mal escrito, en defensa del ministro hay que decir que puede que hiciera la carta con prisas y se olvidara de que tras un punto va una mayúscula y no una minúscula. O que una insigne Universidad como lo es la de Alcalá, no acaba por llamarse Universidad de Alcalá de Henares.

Claro que si nos ponemos así también podríamos decirle al señor Wert que existe una herramienta muy común en los procesadores de texto que se llama corrector ortográfico y que no solo te indica donde están las palabras mal escritas sino que es tan adelantado el invento que te dice si tienes también algún punto o coma mal puesto, algo que se repite en varias ocasiones en el documento enviado por el ministro.

De todas formas quizá las críticas hayan caído sobre el ministro pero probablemente el que ha escrito el texto no ha sido él y a buen seguro que, con esto de la reforma laboral, puede que el protagonista oculto no le vuelva a escribir nada más. Moraleja: No dejes que otros escriban lo que tú has de leer porque como dijo Bufón; escribir bien es poseer al mismo tiempo inteligencia, alma y gusto.

Esta es la crónica habitual, de un día como otro cualquiera…

Síguenos en…

twitter:   @joseluismrtn

facebook:  www.facebook.com/eltridenteblog