Siempre digo que de mi vida personal poco hablo por aquí, porque la idea de este blog es mas bien recopilar información que encuentro, y que puede ser útil en la búsqueda de empleo. Pero os contaré una pequeña anécdota que me ha pasado hoy. Porque la vida está llena de anécdotas, unas pueden ser buenas y otras malas. Y la que me ha pasado a mí, no sé muy bien donde encajarla. Pero la comparto con vosotros. Porque es parte de mi vida como desempleada.
Yo utilizo el Linkedin, no como herramienta de buscar empleo, pues está claro que aún no lo he encontrado. La utilizo mas bien, para enterarme del mundo laboral, noticias, leo los debates y veo gente que está como yo, en alguna ocasión he ayudado a alguna persona dando mi opinión sobre algo.
Hace unos días, buscando temas interesantes sobre empleo, formación, conferencias,empresas…encontré a mi cuñada en Linkedin. Y lamentablemente, no le ha debido de gustar mucho que entre su perfil, que por cierto su perfil está configurado para que lo vea cualquiera, cosa que el mío es más bien privado. El caso, es que no ha debido de gustar. Y me ha dejado alucinada. Y lo peor es que mi pareja se ha llevado toda la bronca en casa. Y no lo comprendo porque no he hecho nada malo. Simplemente he sido una usuaria de Linkedin, pero claro al ser cuñada imaginaros también mi curiosidad por saber de su vida profesional pero no he entrado en su perfil de forma negativa, sino de forma normal como lo haría cualquier persona que utiliza el Linkedin casi que a diario.
El caso, es que su enfado no lo llego a comprender. Yo también estoy buscando empleo, y también ha habido gente que quizás no era del agrado para mi y ha visto mi perfil o mejor dicho lo ha intentado. Porque yo tengo mi perfil privado, solo la gente que yo quiero puede tener la gran suerte de poder visitar y ver mi perfil profesional. Y lo tengo privado, por una sencilla razón: las empresas son creadas por personas, y cada persona es mundo, y hay gente que puede utilizar tus datos de una forma legal y hay gente que no lo hace con ese fin. Y en mi perfil, expongo mi curriculum con datos personales de forma abierta. Y aunque sea una red profesional, no por eso pienso que no tengo que tener cuidado. Y cada empresa en su mundo, y cada persona también. Con lo cual en mi sincera opinión tener cuidado, es de ser precavida. Aunque pesándolo bien sería mas precavida si en mi curriculum no pondría mis datos personales, pero bueno es una autocritica, que quizás mañana haga ciertos cambios.
Pero cuando alguien visita tu perfil o en mi caso lo intenta, queda reflejado quien ha visitado mi perfil. Y obviamente, cuando vi el perfil de esta chica, avisé a mi pareja de lo que podía pasar. Y de hecho ha pasado bastante días hasta que hoy se ha debido de “armar la bronca”. Yo le avisé, simplemente porque me llamó la atención de que tuviera Linkedin, porque las pocas veces que he estado con ella nunca lo había mencionado.
No entiendo porque esta chica la tiene tan tomada conmigo, quizás es que no sea de su categoría, pues yo no he llegado a ser subdirectora de ningún empresa. Y en mi humilde opinión y a modo de autocritica, ni yo misma creo que tengo el perfil para ser directora de ningún sitio. Porque la idea que hay de ser Director de una empresa es la de mandar. Ya sé que el liderazgo esta moda ahora, pero para ser realistas, un Director puede ser tu jefe, y tu jefe te manda. Normalmente no te va a pedir la opinión, normalmente el ya ha decido cual va ser el camino que va a coger la empresa.
Pero para no irme por los cerros de Úbeda… sinceramente hay personas que jamás llegaré a comprender. Mientras ella te dice cualquier cosa a tu espaldas, yo me callo. Mientras ella me va poniendo a mis espaldas de ser una niña…yo veo su perfil en Linkedin (una red profesional y adulta) y se arma la de “San Quintín”
Volveré a guardar mis palabras, creo que con lo que cuento deja muy claro a que altura está cada una. Pero lo que no comprendo es que hago yo, leyendo su perfil, si me tendría que dar igual. A veces he visto ofertas de trabajo relacionado con lo suyo. Y se lo he comentado a mi pareja. Yo es que a veces de verdad, no aprendo. Soy tan buena que parezco con perdón idiota, no aprendo.
No sé, igual a la 5º pedrada igual me doy cuenta de como es esta chica. A veces me encantaría ser otra persona diferente. Con 28 años, tengo la suerte de poder seguir aprendiendo y voy a intentar ver esta anécdota como algo propio de mi aprendizaje personal. Y es que hay gente que no cambia ni manteniéndote alejada. Siempre dicen que cuando las brasas están muy calientes en un momento dado, el tiempo lo cura todo o casi todo. Pero con esta persona estoy viendo que no. Que va a ser así de por vida. ¡Y es una pena!. Porque bastante la vida ya te complica, como para encima andar con tonterías.
Ya sabéis si tenéis cuñada buscando empleo y no te llevas bien y tiene Linkedin, mejor no mires ni su perfil. No vaya a ser que te saque los ojos.