Hay un pequeño lugar

Por Julio Alejandre @JAC_alejandre

Hay un pequeño lugar envuelto en brumas, allá en el corazón más recóndito del lugar más secreto, no tiene nombre ni emplazamiento, es desconocido aún por la ciencia, la tecnología y, lo que es más extraño, también por el mercado. No lo busquéis, pues, en los libros de física, ni en los atlas de anatomía, ni en los cultivos de los laboratorios, ni en la Quinta Avenida, ni siquiera en el rincón del gourmet del Corte Inglés, porque es personal e intransferible. Y en ese lugar existe una piedra de rayo, diminuta, trasparente, de la dureza de la roca y en apariencia indestructible, pero con la fragilidad del diamante, sobre la que descansan, reunidos en un haz, todos los cimientos del ser. Si esa piedra se quiebra, la construcción se desmorona como una torre de palillos… y todo se viene abajo.