"Mamaita que dolor", así se resume mi última semana. El pasado martes un fortísimo dolor abdominal hizo que me levantase de cama a la una de la madrugada para tirarme en la alfombra a morder el polvo (que por cierto era bastante, ya que hacía unos días que no pasábamos la aspiradora). Tuve que llamar a mi querido marido que esa noche trabajaba (no se por qué estas cosas siempre pasan por la noche y cuando se está solo) y que viniese a ayudarme porque yo no me podía ni mover. Vino la ambulancia, vino también mi hermano para quedarse con mis peques (que no se enteraron de nada los pobres) y allá me fui muerta de dolor. Ya en el hospital parecíamos una escena de "Alguien voló sobre el nido del cuco", imaginaos, yo en pijama, toda despeinada, con cara de pirada y encogida en el suelo porque era la única posición en que podía aguantar un poco, y mi marido, que venía del trabajo, con su uniforme y todo serio . . . cada vez que entraba alguien en el box le decía
"Hay cariño que van a pensar que me escapé del psiquiatrico y me vas a detener, dame la manita anda" y vuelta al suelo a agonizar (anda que lo que tiene aguantado este marido mio no es normal); en fin,que tras varias pruebas, análisis y tal, me dicen que he tenido un cólico nefrítico (eso si, no vieron ni piedra, ni arena, ni nada, pero ese fue mi diagnostico). Me fui para casa encantada con unos maravillosos analgésicos, que me hacían ver flores de colores y lucecitas resplandecientes . . . todo bien hasta que dos días después otra vez ese dolor infernal en mi abdomen volvía a surgir . . . vuelta al hospital, esta vez sin el numerito de la ambulancia, y tras varias pruebas mas, y después de pasarme la tarde en una camilla aparcada en medio de un pasillo de unas urgencias atestadas de gente (pero mira que bien está la sanidad pública, oiga!!!!), me dicen que de cólico nada, que lo que tengo es una torsión de ovario que es lo que me causa ese dolor insoportable . . . y digo yo, como se puede tener tan mala suerte de que me toque el médico repetidor, el que se perdió la clase en la que coco explica que los ovarios están delante y los riñones están detrás . . . en fin corramos un tupido velo porque si no planto fuego al hospital con todos dentro . . . Por cierto, para los machitos que estéis leyendo esto y que estéis pensando
"Ya están estas con sus cositas de ovarios", hagamos una demostración practica: hagan el favor, bajense los pantalones y calzoncillos, cojanse un huevo, retuerzanselo hasta no poder mas . . . Ya???? . . . pues multipliquen ese dolor con catorcemil y fue el dolor que yo tuve . . . En fin amig@s, ya está, ya ha pasado y ya estoy aquí de nuevo, perdonadme por la ausencia pero, y ahora en serio, he estado escarallada perdida, tirada en el sillón sin fuerzas para nada, pero ya he vuelto, y para celebrarlo os invito a una comida exótica pero muy sencilla que os va a encantar!!!!
Pollo al curryIngredientes:
- 1/2 pechuga de pollo cortada en dados
- 250 ml de nata para cocinar
- Una cebolla
- Un diente de ajo
- Curry
- Sal
- Perejil fresco
- Pan naan
- Arroz salvaje
En una tartera doramos la cebolla y el ajo cortados muy finos. Añadimos la nata, una pizca de sal y el curry al gusto, lo mejor es ir echando poco a poco e ir añadiendo hasta alcanzar el sabor que deseemos. Batimos la mezcla con la batidora para deshacer la cebolla y el ajo y reservamos la salsa. En una sartén doramos el pollo salpimentado y añadimos a la tartera de la salsa. Lo dejamos a fuego medio durante quince minutos, añadimos un puñado de perejil fresco y listo. Yo lo acompañé de un poco de arroz salvaje y pan naan que es un pan hindú que se puede encontrar en cualquier supermercado
pollo al curry