Waldek Grodek es un niño polaco cuya apacible vida se ve interrumpida por la invasión alemana a Polonia. A partir de ese momento, sus juegos infantiles y sus excursiones como Boy Scout se transformaron en estrategias para luchar contra los nazis.
Así comienza la historia de
La búsqueda, novela escrita por la venezolana
Blanca Miosi que ha ocupado los primeros lugares de venta digital de las principales casas literarias como
Amazon y la Casa del Libro. Fue publicada por primera vez en papel en el año 2008 por la Editorial Roca y ahora la podemos encontrar en versión Kindle y en otros formatos digitales.
La trama gira en torno a la vida de
Waldek Grodek, quien después de escapar de la guerra y de los campos de
concentración nazis, como el de
Auschwitz y
Mauthausen, debe vivir en medio de dictaduras en Europa y América Latina, logrando protagonizar tramas de espionaje hasta en el
Mossad (agencia de inteligencia de Israel), paseándonos desde la invasión de
Varsovia al ataque de las
torres gemelas en
Nueva York. E
s la descripción de una vida sorprendente que formó parte de la vida real, ya que cuenta lo vivido por quien fue en vida el esposo de la autora. Según lo explicado en la sinopsis:
La búsqueda es una obra que trata sobre la condición humana y sobre cómo debemos enfrentarnos al dolor para seguir adelante, con un ritmo vivo y cautivador.
En el blog
Libros que voy leyendo la reseñan de la siguiente manera:
“He sentido de una forma muy intensa los horrores de la guerra, he visto a través de los ojos de Waldek el sufrimiento que le rodeaba y he sufrido a través de sus carnes las torturas, el hambre y las desgracias. No hay muchas novelas que puedan presumir de lograr eso. Pero es que además, la historia no se centra solo en el holocausto, no, pues la vida de Waldek fue una vida vivida intensamente, con muchos giros del destino que nos sorprenden, alegran o aterran”.
Es una historia cruda, que narra los dolores de una guerra y las vicisitudes de una vida marcada por la injusticia de forma desgarradora. Incluso, posee algunas reflexiones que dejan la piel de gallina, pero que quizás no están muy alejadas de la realidad:
“Pienso que la historia es repetitiva porque los hombres tenemos mala memoria. Los muertos no hablan. Los supervivientes olvidan, callan como lo hice yo durante tanto tiempo y los pocos que llegamos a contar nuestras experiencias nos convertimos en algo de apariencia irreal: mitad mito, mitad tópico; testimonios de un pasado que muchos creen que no puede volver. ¿No se dan cuenta de que el mundo es como un tren de feria, dando vueltas siempre por los mismos lugares? Las nuevas generaciones se equivocan al pensar que los errores no pueden repetirse. No es así. Se repetirán los mismos desatinos, se izarán las mismas banderas, volverán los mismos líderes y el horror empezará otra vez. No importa cuántas veces suceda, así es y será”.
En un dossier que la autora presenta en su
blog encontramos:
1 de septiembre de 1939: La mañana en que comienza el ataque alemán sobre Varsovia, Waldek Grodek tiene apenas once años. Es demasiado joven para imaginar el horror de una guerra, y la emoción y la curiosidad por lo que pasa en Varsovia, le hacen regresar a la ciudad desde el campo, donde estaba de vacaciones junto a su hermana menor y su madre. Su padre es inspector de canales de la ciudad y está desbordado intentando que los servicios no se colapsen por los destrozos de los bombardeos. Pasan los días, y el refugio donde se alojan no permite casi respirar, cubiertos de tierra y sin comida, los rezos y oraciones se mezclan con los gritos de pánico. En un descuido de su madre, Waldek escapa para visitar una ciudad de la que sólo quedan ruinas. Ese día descubre lo que a lo largo de su vida llamará su buena suerte: tropieza y cae en la calle, mientras una bomba estalla a pocos metros y mata a las personas que caminaban a su lado. Al regresar al refugio aturdido toma conciencia de que en cualquier momento puede perder a sus seres queridos. En menos de veinte días, la rendición de Varsovia se firma y Adolf Hitler visita su nueva conquista. Waldek siente que los polacos no tienen nada que festejar, su ciudad ya no les pertenece y nace en él un patriotismo radical y desconocido. …Es apenas un adolescente pero la guerra todo lo precipita y comienza a trabajar en la resistencia, pero no pasa mucho tiempo hasta que la Policía de Seguridad descubre a su grupo clandestino. Con catorce años es tratado como un preso político, y lo trasladan a una cárcel en el gueto llena de delincuentes de todo tipo.
A partir de ese momento y hasta el final de la guerra, Waldek Grodek pasa por los campos de concentración de Birkenau, Auschwitz y Mauthausen. Marcado como un animal, aprende que no hay lugar para la debilidad o el dolor. Los campos son escuelas de dolor e indiferencia, donde se es testigo de todo tipo de abusos, experimentos con personas, pederastia. Descubre que
los seres humanos están dispuestos a aguantar las peores injusticias y los peores castigos con tal de seguir con vida. Pero también conoce a algunas personas, tanto judíos como alemanes, que
en medio de tanta miseria le hacen creer que aún hay esperanza…
Waldek sabe que la búsqueda es diferente para cada uno, hay quien busca el reconocimiento de la historia, hay quien el amor y el respeto de quienes ama. Pero
¿cuál es su búsqueda? Si desean adquirir el libro y
disfrutar de esta maravillosa historia, pueden hacerlo a través del portal de
Amazon, y si desean saber más de la autora y sus proyectos no dejen de visitar
su blog personal.
ESCRITO POR JONAIRAJonaira J. Campagnuolo (Maracay-Venezuela). Técnico Superior Universitario en Informática. Actualmente freelance, administradora del blog
Desde mi Caldero y escritora a tiempo completo. Colaboradora habitual de revistas literarias como MiNatura y Mujer Fatal, y co-administradora del portal de formación
Escribe Romántica.