HENKEL, Willi y SARANYANA, Josep-Ignasi. Die Konzilien in Lateinamerika. Teil II. Lima 1551-1927

Por Joseantoniobenito

HENKEL, Willi y SARANYANA, Josep-Ignasi. Die Konzilien in Lateinamerika. Teil II. Lima 1551-1927. Ferdinand Schöningh, Paderborn, 2010. 306 p.

Este volumen es –que sepamos– la primera historia, en lengua alemana, de los Concilios y Sínodos limenses entre 1551 y 1927. Ha sido preparada por dos especialistas en temas de historia eclesiástica latinoamericana: los profesores Willi Henkel y Josep-Ignasi Sranyana. La edición forma parte de la colección (en alemán) de la historia de los concilios, creada por mons. Walter Bradmüller, presidente de la Pontificia Comisión de Ciencias Históricas, y continuada por los profesores Thomas Prügl (Universidad de Viena) y Peter Bruns (Universidad de Bamberg).

Willi Henkel, Misionero Oblato de María Inmaculada, trata de los Concilios limenses de 1551-52, 1567-78, 1582-83, 1591-1601 convocados por Jerónimo de Loaysa y Toribio de Mogrovejo- y 1772-73. En cambio Josep-Ignasi Saranyana se ocupa de los Sínodos provinciales de 1909-12 y 1927.

Ordenadamente proceden los autores informando acerca de la convocatoria, los participantes, el desarrollo de cada uno de los eventos, los decretos, la aprobación pontificia y la publicación ulterior de ellos.

Dada la importancia del III Concilio limense de 1582 (época en la cual el arzobispado de Lima incluía gran parte de América meridional y central) es abundante la información que nos ofrece el profesor Henkel, con un gran dominio de la nutrida bibliografía, los autores antiguos y modernos consultados, así como los archivos visitados. Son 77 páginas densas de contenido. El autor subraya la oportunidad de los decretos del concilio toribiano, la preparación y edición de los Catecismos trilingües (español, quechua y aymara), a los que califica de "documento único de inapreciable valor" (p. 113).

Menos conocidos son los sínodos provinciales de Lima en el siglo XX. El profesor Saranyana ha logrado una excelente descripción de esas asambleas episcopales, efectuadas en el contexto de la historia civil y eclesiástica del país, en que destaca la actividad del arzobispo Emilio Lissón Chaves C.M. Nos permitimos aquí, no tanto una corrección en la bibliografía de Lissón, sino una añadidura. Efectivamente el prelado limeño falleció en Valencia en 1961. Treinta años después, por expreso deseo del arzobispo Cardenal Augusto Vargas Alzamora, los restos de mons. Lissón, traídos de España, reposan desde el 25 de julio de 1991 en la cripta arzobispal de la catedral de Lima. En el conciso epílogo (Nachwort) del libro, Saranyana reitera lo que Henkel había verificado. "Con mucho, el más significativo Concilio Pronvincial fue el III Concilio limense". Llevó a cabo la recepción del Tridentino, creó un derecho canónico unitario para la Provincia y dio impulso a la fundación de los Seminarios" (p. 291).

Hay que agradecer a los profesores Hankel y Saranyana este estimable estudio, ya que proyecta hacia el mundo germano lo que en realidad fue un notable esfuerzo por la evangelización del Nuevo Continente a partir del siglo XVI.

Armando Nieto Vélez, S.J.