Grandes papeles e historias han sido contadas a través de sus grandes interpretaciones, pero la vida también les ha puesto a prueba y han superado momentos duros. Lady Gaga, Julie Andrews, Ellen Pompeo y Emilia Clarke son ejemplos de que la vida puede tener los papeles más dramáticos.
Lady Gaga y su pasado oscuro
Lady Gaga superó el estereotipo de chica rebelde y desinteresada para hacer a todos llorar con su presentación en los Oscars de 2016.
La cantante ha revelado que fue víctima de abusos cuando fue joven. Canciones como ‘Swine’ y ‘Til it happen to you’ revelan los traumas y pesares que ha sobrepasado con mucho esfuerzo.
De “Novicia” a escritora
Julie Andrews protagonizó la recordada “Novicia Rebelde” con una actuación y canto que fascinaron a todos. Sin embargo, la también protagonista de “Mary Poppins”, no tuvo una infancia de ensueño.
La actriz reveló que el esposo de su madre le habría maltratado e incluso intentó abusar de ella. Migrante en Estados Unidos con apenas 20 años, comenzó con esfuerzo su carrera de éxitos.
En 1997 la vida le daría otra prueba y debería someterse a una operación que le arrebató su canto. Reinventarse fue complejo y la llevó casi a la depresión. Junto a su hija comenzó a escribir libros infantiles y a retomar confianza en la actuación.
Papeles memorables como la reina en “Diario de una Princesa” donde compartió escena con Anne Hathaway y en animaciones como “Shrek” donde también interpretaría una reina.
La vida como Meredith
Ellen Pompeo ha demostrado que es posible envejecer en la pantalla. Desde que grabó el piloto de “Grey’s Anatomy” a sus 30, ahora en sus 50 espera el estreno de la nueva temporada en Netflix.
Interpretando a Meredith Grey ha sufrido las mil y una, desde la perdida de su esposo y hermana hasta casi perder la vida en varias ocasiones. La vida real de Pompeo ha tenido sus vicisitudes.
Su madre se suicidaría cuando apenas tenía 5 años. Su padre no sabría lidiar con el hecho y estaría ausente en la crianza de Pompeo y sus hermanas. Fue complejo lidiar con la ausencia física de una madre y la distancia de su padre.
Recién a los 24 años se mudaría a Los Ángeles donde comenzaría su carrera en el espectáculo hasta dar con la exitosa serie televisiva.
Batallas tan duras como las de Daenerys
Emilia Clarke tendría lo que cualquier actriz soñaría tener a los 24 años. La joven protagonista de la afamada serie “Juego de Tronos” tendría toda la atención de los medios y fanáticos. Atención que le costaría asimilar y terminaría dándole una mala pasada.
Durante una sesión de ejercicios, Clark sufriría de un intenso dolor en la cabeza que resultaría en una aneurisma. Sus peores temores llegarían en la recuperación cuando le preguntaron su nombre y no lo recordaba.
Como actriz, es parte de su trabajo recordar diálogos y escenas pero, sin siquiera poder recordar su nombre, temió lo peor. Una segunda aneurisma aparecería durante la recuperación. Los doctores habrían decidido operarla pero una hemorragia puso en riesgo su vida.
Recuperada y habiendo superado lo peor, la actriz confiesa que disfruta mucho más la vida. Además crearía la fundación “SameYou” para ayudar a la recuperación de pacientes con lesiones cerebrales.