El Rock'n'Roll, los músicos de Rock y las bandas han sido objeto de reiterados ataques y denostaciones a lo largo del medio siglo largo que lleva de existencia este género musical. Nos hemos referido a ello en un post anterior.
The Beatles no han escapado a esa andanada y han protagonizado especialmente episodios en los que las iras de ciertos sectores han recaído sobre ellos y su música.
Quizás el episodio más famoso fue el de las expresiones de John Lennon acerca del Cristianismo y la fama de The Beatles y Jesús. "El cristianismo desaparecerá... Se desvanecerá y desaparecerá ... No necesito discutir sobre eso; sé que tengo razón y la voy a tener... Somos más populares que Jesús ahora, no sé quién desaparecerá primero, si el Rock'n'Roll o el cristianismo...", declaró John a la periodista Maureen Cleave del London Evening Standard en marzo de 1966. Unos cinco meses después, el asunto levantó polvareda cuando la entrevista fue republicada en la revista estadounidense para adolescentes Datebook y la frase de John apareció como título de portada, pero recortada realzando su aspecto más sensacionalista. Y aunque la frase que también reproducían de McCartney podía ser más incisiva y "ofensiva" contra Estados Unidos, fue la de John la que pegó más duro en el conservadurismo del fundamentalismo cristiano estadounidense. Ya es conocida la ola de rechazo y la campaña contra Lennon y The Beatles que se desató en USA en vísperas de la que sería su última gira por ese país y, a la postre, por el mundo.
Esto fue en 1966 y es muy conocido, pero no fue ni con mucho la primera reacción adversa cosechada en USA de parte de fundamentalistas religiosos. En 1965 una organización religiosa originaria de Tulsa, Oklahoma, llamada Christian Crusade la emprendió contra The Beatles con argumentaciones seudo científicas y a la vez, teñidas de un total subjetivismo religioso y anti - comunismo simultáneamente.
La Christian Crusade fue creada y dirigida por el Reverendo Billy James Hargis, conteniendo un mensaje de corte anti - comunista, segregacionista y fundamentalista cristiano por medio de emisiones radiales y televisivas que llegaron a realizarse a través de más de 500 estaciones de radio y 250 de TV.
Esta organización libró varias publicaciones que vinculan al Rock'n'Roll con las actividades anti - norteamericanas, la guerra fría, el anti - cristianismo y varias cosas más. El principal autor de esos libelos es el miembro de la Christian Crusade David A. Noebel. Entre los varios títulos que publicó se cuentan los siguientes, de elocuentes títulos:
- Communism, Hypnotism and The Beatles [1965]
- Rhythm, riots, and revolution: An analysis of the Communist use of music, the Communist master music plan [1966]
- The Beatles: A Study in Drugs, Sex, & Revolution [1969]
- The Marxist Minstrels: A Handbook on Communist Subversion of Music [1974]
- The Legacy of John Lennon: Charming or Harming a Generation? [1982]
A su lista se agregan también otros títulos referentes a la homosexualidad, el SIDA o "las visiones del mundo no bíblicas" [SIC].
Nos interesa en particular el primero de los títulos, dado que su fecha es anterior a la furibunda reacción a los dichos de Lennon. Es decir que había ya una predisposición muy marcada, como se desprende del texto en cuestión, a considerar peligrosa y perniciosa la música de The Beatles y no solamente ella, sino también toda la nueva música.
Pero digamos algo más. El contexto de estas publicaciones fue el de la guerra fría y el de la caza de brujas anti - comunista que asoló a EEUU especialmente luego de la Segunda Guerra. También integra ese contexto el de la Lucha por los Derechos Civiles llevada adelante por los movimientos antisegregacionistas. El Rev. Billy James Hargis se embanderó con las posicones más retardatarias en esa coyuntura y pondría la Christian Crusade al servicio de las fuerzas ultraconservadoras. En 1964 apoyó la candidatura presidencial del senador republicano Barry Goldwater que había logrado ser candidato venciendo a su rival 'moderado', Nelson Rockefeller y considerado como el ala más radical de la derecha republicana. [Perdió por destrozo con Lyndon Johnson]. A la vez, Hargis basa sus enfoques y también lo hace Noebel, en las informaciones emanadas del House Committee on Un-American Activities, un comité especial de investigación de actividades potencialmente anti - norteamericanas que se convirtió en el epicentro de la caza de brujas que afectó especialmente al mundo de los artistas, escritores, pensadores e intelectuales.
Si bien el libro de Noebel es de circulación libre, se encuentra incorporado también a un dossier del FBI que fuera desclasificado en 1979. Ese dossier refiere a la Christian Crusade, como organización, ya que el FBI monitorea todas las organizaciones en actividad.
En ese dossier hay interesantes cartas. Algunas son de particulares o instituciones que solicitan información sobre la Christian Crusade y su caracter. Otras son las respuestas firmadas por el propio Edgar J. Hoover, el legendario director del FBI, y digamos que en la mayoría de los casos se ampara en que hay informaciones que deben mantenerse reservadas. También hay numerosas cartas de Hargis dirigidas al director del FBI con motivos varios [uno de ellos es remitirle un ejemplar del libro de Noebel a que hacemos referencia] en las que invariablemente elogia a Hoover por el invalorable trabajo de protección anti - comunista que está realizando y aportándole lo que a su juicio son informaciones relevantes para luchar contra el comunismo en USA.
De esto se desprende que Hargis se sentía al menos colaborador, cuando no informante del FBI. Pero del dossier también se desprende, por documentos internos, que el FBI tenía sus dudas acerca de esta y otras organizaciones [sobre las que investigaba si había vínculos] como la Christian Crusade a las que consideraba lisa y llanamente extremistas. El dossier completo puede consultarse en https://archive.org/stream/foia_Christian_Crusade-Billy_James_Hargis-HQ-1/Christian_Crusade-Billy_James_Hargis-HQ-1#page/n9/mode/2up
Este es el título de la primera publicación de Noebel, que data de 1965. En ella intenta vincular el comunismo con las investigaciones sobre hipnosis y la música rock y folk. La base de la que parte es que el propósito del comunismo es la destrucción de los Estados Unidos.
"No es un secreto que los comunistas han decidido en sus conciliábulos destruir a los Estados Unidos de América. Los métodos para obtener nuestra destrucción han variado con el tiempo, pero el objetivo no ha cambiado." Señala que uno de los métodos que emplean es el menticidio, esto es, llevar a un colapso suicida de la mente. Para ello habrían desarrollado métodos y técnicas para lograr mentes enfermas. "Los comunistas, a través de sus científicos, educadores y animadores y artistas, inventaron una técnica elaborada, calculada y científica dirigida a convertir en inútil a una generación de jóvenes americanos a través de la interferencia nerviosa, deterioro mental y retardo. Este plan implica reflejos condicionados, hipnotismo y cierto tipo de música".
El plan tendría como objetivo lograr que la sociedad norteamericana se destruyera por sí misma, deteriorando a su juventud. Para 'fundamentar' la premisa, pasa revista a los estudios de los rusos Pavlov [sobre reflejo condicionado], Luria [sobre hipnotismo y música] y Platonov [sobre el poder de la palabra en la terapéutica].
De allí infiere que desplegaron un plan maestro a través de la música y sus propiedades hipnóticas, por medio de la administración de los reflejos exitatorio e inhibitorio. Para ello se debería contar con quienes distribuyeran los medios para incidir en las mentes de niños y jóvenes. El medio que habrían tenido serían los maestros y las propias madres, a través de discos que ayudarían a los niños a estar tranquilos, a dormir, etc. Noebel identifica a los sellos Young People's Records y Children's Record Guild como la 'factoría' de tales músicas, que serían los vehículos para incidir en la 'destrucción mental' que conduciría a la autodestrucción de USA.
Una de sus principales argumentaciones para adjudicar una intencionalidad política a las producciones de esos discos es que intervienen en ellas personalidades como Peter Seeger, Earl Robinson o Woody Guthrie, quienes sostuvieron convicciones comunistas en ciertos momentos de su vida. Es probable que la música para niños [como los discos actuales Mozart para niños, Beatles para niños, etc.] provocara efectos de sedación, relax y estímulos sensoriales, pero resulta muy mecanicista y simplista plantear la ecuación Comunista - Música para Niños - Lavado de Cerebro, como se desprende del razonamiento del autor.
Ese nexo es el que no queda nunca bien establecido, es más es una premisa previa al planteo, con lo cual queda claro que no se intenta demostrar nada sino reforzar un prejuicio. Dice luego el autor: Vuelve sobre los reflejos condicionados pavlovianos para explicar la Beatlemania, evidentes episodios de histeria colectiva, solo que los considera inducidos y programados para lograr que los jóvenes se rebelaran. Señala que los reflejos inhibitorios que la sociedad imprime en sus hijos, como comportarse decentemente, no desnudarse en público, no destruir auditorios, etc., son destruidos tras 29 minutos de actuación de The Beatles. Concluye de eso que Dice también que se hace imperativo conocer la filosofía de The Beatles y lo resuelve muy fácilmente basándose en lo que dijera en 1964 el Rev. Billy James Hargis desde Londres: [Cita lo escrito en el Atlantic Monthly]
"Pero nuestro niños más pequeños no son los únicos en sermanipulados por los comunistas. Se aprovechan también de nuestros adolescentes, al menos por tres razones: a) su propia desmoralización, b) para provocar en ellos enfermedades mentales a través de neurosis artificiales y c) para prepararlos para la revuelta y finalmente la revolución destinada a destruir nuestra forma americana de gobierno y los principios cristianos básicos que rigen nuestro estilo de vida".
"la destructiva música de The Beatles solamente refuerza el reflejo excitatorio de los jóvenes hasta el punto de transgredir el reflejo inhibitorio". Tal estado hipnótico, sigue, permitiríaque se indujera a los jóvenes a hacer cualquier cosa.
"La multitud beatnik, representada por The Beatles, es la multitud comunista". Así de simple.
Otras asociaciones se vuelven más risibles aún, como el hecho de que el patrocinador de The Beatles en Wisconsin tuviera un lugar donde vendían libros [comunistas en la valoración del autor] tales como el de Peter Seeger "Folk Songs". [!!!]
A medida que avanza el planteo el enardecimiento va en aumento y aparecen consideraciones como:
"Este tipo de música, según parece, es la más peligrosa e insidiosa arma en la batalla entre la Luz y las Tinieblas para las mentes, cuerpos y almas de los jóvenes, tanto como lo son la películas salaces y la literatura pornográfica ..."
[Discute el carácter artístico del Rock] "La música no es una forma artística sino un proceso muy destructivo. El quebranto mental es altísimo y la delincuencia juvenil está cercana a destruir nuestra sociedad. Ambas están causadas en parte por la inestabilidad emocional a su vez causada en parte por la música destructiva tal como el rock and roll y ciertos tipos de jazz."
La conclusión final del autor: "Es evidente que los comunistas tienen un plan musical maestro para todos los niveles de edad de la juventud americana. Sabemos por pruewbas documentadas que este es el caso de los niños de uno y dos años con la música rítmica; sabemos que tal es el caso de los escolares con la música rítmica y para los universitarios con la música folk. ¿Qué cosa, sino el rock and roll se ajusta a los adolescentes? No estamos diciendo que los comunistas hayan inventado el rock and roll u otro tipo de música, pero de hecho saben cómo usar cada música en su provecho".
El escrito termina apocalíptico: "Asegúrense de que sus hogares, iglesias, casas de discos y estaciones de TV no reproduzcan o vendan discos de Young People's Records o Children's Records Guild. Asegúrense de que sus escuelas no usen esos discos comunistas. La guerra cibernética es el arma más reciente y no podemos permitir que haya niños perturbados de los nervios! Tiren todos sus discos de The Beatles y de rock and roll al basurero. [...] Estén seguros que cuatro peludos beatniks anti Cristos no destruirán la estabilidad emocional y mental de nuestros niños ni finalmente destruirán nuestra nación ..."
Un año más tarde, en numerosos lugares de USA, las piras de fotos y discos de The Beatles se alzaron intolerantes ante la nueva gira de la banda por diversos estados de USA, algunos de ellos pertenecientes al Bible Belt, como Tennessee [Memphis], Ohio [sur, Cincinnati] o Misuri [St. Louis]. Pocos días antes se había republicado el reportaje de medio año antes en el que John dijo aquello de la popularidad y Jesús. Pero sin duda que existía un clima previo que hizo que The Beatles cayeran en el medio de un clima al que eran ajenos en el que se mezclaban ingredientes tan explosivos como fundamentalismo religioso, segregacionismo, guerra fría, conflicto generacional y asimetría en el ejercicio de los derechos, entre otros.
John Lennon, sin embargo, volvería años después a vivir a USA, a Nueva York, su ciudad más cosmopolita. Tendría serios problemas para poder mantener su residencia legal. Peor aún que eso es que también quedó a merced de alguien que se arrogó la potestad de llevarse su vida de cinco tiros en diciembre de 1980.
Paul McCartney volvería muchas veces a USA, para actuar ya como solista, ya con su banda Wings. Pero la problemática socio - racial de Estados Unidos lo llevó, en 1968, a escribir uno de sus mejores temas, que aborda, metafóricamente, la lucha por los derechos civiles en USA: Blackbird.
Volveremos con otros episodios de la Historia Beatle.
Hasta entonces.