Guaranda, con una superficie de 1897,8 km2, se encuentra en la región interandina ecuatoriana, en el vértice de la confluencia de los ríos Illangama o Guaranda y Salinas, que forman el río Chimbo, a una altura de 2668 msnm . La ciudad está asentada seguramente sobre material volcánico acumulado, lo cual da mayor fertilidad a sus tierras. Estas características geográficas hacen que la ciudad tenga un clima templado, el cual, no obstante, puede variar desde los fríos de páramo (debido a su cercanía al Chimborazo), hasta un temperado subtropical de valle. Con la excepción de una parte de Guanujo —una de las parroquias urbanas de Guaranda, que se considera como zona de páramo (con vegetación predominante de pajonales y una temperatura promedio de 8°C) al estar ubicada a más de 3000 msnm—, la mayor parte de la ciudad está situada en la zona de valle de la hoya del Chimbo y muestra una vegetación que corresponde a la clasificación de bosque húmedo montano, bosque húmedo pre-montano y montano bajo y bosque seco pre-montano y montano bajo, con una temperatura que varía entre los 13°C y 19°C. Lastimosamente, esta variedad de microclimas se ha ido perdiendo con la deforestación causada por las malas prácticas agrícolas. Para sus habitantes, el hermoso paisaje de la ciudad es uno de sus mayores atributos, y es que su ubicación permite contemplar las colinas que la rodean: Cruz Loma, Loma de Guaranda, San Jacinto, San Bartolo, Talalac, Tililac y el Calvario. Por ellas, Guaranda es conocida como “la ciudad de las siete colinas” desde donde se observa el coloso Chimborazo, el volcán más alto del Ecuador, que hace que el paisaje de la ciudad sea espectacular.
Historia de Guaranda La Historia tiene como objetivo explicar las causas de los acontecimientos y contar cómo vivían, qué hacían, en qué pensaban, en qué creían y qué les gustaba o disgustaba a nuestros antepasados. Para hablar sobre la identidad de un pueblo es menester regresar al pasado, pues lo que somos es lo que hemos vivido desde que nacimos y lo que hemos construido a lo largo de los años como individuos. Por ello, es necesario comprender la Historia, como un ejercicio de entendernos a nosotros mismos, de conocer de dónde venimos y, por lo tanto, quiénes somos y cuáles son los aspectos que construyen nuestra identidad. En el caso de Guaranda, un recorrido por su historia permitirá comprender cómo pasó de ser un asentamiento indígena (donde no solamente convivió una etnia, sino varias) a ser una villa de españoles y criollos, y luego una ciudad de encuentros y desencuentros entre mestizos e indígenas.
Época aborigen Hay muy poca información arqueológica o etnohistórica acerca del territorio que actualmente comprende Guaranda. Lo que se conoce proviene principalmente de documentos escritos por viajeros y cronistas coloniales, es decir, de descripciones acerca de lo que ellos vieron en aquel tiempo en que la llamada Tierra de Indias fue descubierta por los españoles. Esto, claro está, no significa que Guaranda carezca de una historia previa a la conquista española. Hay algunos sitios arqueológicos y datos que aportan a su conocimiento; sin embargo, hacen falta investigaciones que esclarezcan cómo era el pasado prehispánico de la provincia de Bolívar. Se podría decir, que incluso antes de la llegada de los incas, la zona de los chimbos era un paso obligatorio para cruzar estas dos regiones: Costa y Sierra. Ahora bien, al hablar de este grupo humano, que tal vez fue el primero en habitar la región en donde se ubica la actual Guaranda, hay poca información que explique sobre su organización social, áreas de influencia o extensión del territorio que ocupó. En otras palabras, aunque se conoce que la provincia de los chimbos estaba conformada por varias agrupaciones locales o cacicazgos, no se puede saber con certeza si estuvo regida a una organización política superior o si cada una tenía su propio funcionamiento sin tener que obedecer a un jefe mayor. El investigador Moreno explica que, dado que durante la Colonia los cacicazgos de Guanujo y Guaranda, así como los ayllus subordinados de Simiátug y Tomabela, estuvieron regidos por miembros de la familia Cando Pilamunga, se puede plantear la hipótesis de “la existencia de alguna relación entre las autoridades étnicas de la zona superior de la cuenca del Chimbo (Guaranda, Guanujo, Salinas, Simiátug) con el cacicazgo de Pilahuín (al suroeste de Ambato) y parcialidades a él adjuntas”.