Por un lado, el desarrollo de las tecnologías y las disciplinas que permitan la fabricación del invento; en el caso de la fotografía disciplinas como: la física, la química o la óptica.
Por otro lado, que el invento venga a cubrir una necesidad; en este caso, en la fotografía, congelar el tiempo e inmortalizar cualquier suceso o escena.
Lo cierto es que el deseo de inmortalizarnos y de inmortalizar nuestro entorno nos viene acompañando desde nuestros orígenes, pero no es hasta el s.XIX cuando se cumple las dos circunstancias anteriores y exista la posibilidad de inventar la fotografía.
Como casi siempre, los chinos nos adelantan en todo y ellos fueron los primeros en desarrollar los antecedentes de la fotografía, allá por el año 500 a.c.
Hablamos de la Cámara Oscura que permite proyectar imágenes en una superficie con el simple hecho de hacer pasar los rayos de la luz a través de un pequeño orificio. No obstante, entre la Grecia clásica y la Grecia helenística, Aristóteles utilizó este mismo invento para estudiar los eclipses de sol.
Se conoce ya bastantes aspectos sobre la física y la óptica, pero cuando a mediados del s. XVIII los químicos descubren el efecto que tiene la luz sobre ciertas sales de plata, se abrió la posibilidad de imprimir la luz sobre un soporte físico, o sea, un papel sensible a la luz, el “papel fotográfico”.
SIGLO XIX
No fue hasta los años 20 del s. XIX, cuando se realiza la primera fotografía de verdad, la que quedaba impresa definitivamente sobre el papel; bueno, quizás no sea la primera fotografía, pero sí la que se conserva como más antigua. Se realizó en 1826 y tuvo un tiempo de exposición de 8 horas.
En la imagen: Primera fotografía “Punto de vista desde la ventana de Gras”, año 1826.
En 1831, Daguerre consigue perfeccionar el invento en cuanto al tiempo de exposición a la luz para capturar la foto, así como que la imagen apareciese más nítida, es decir, con mejor calidad.
En 1833, poco antes de que el invento alcanzara fama mundial, muere Nicéphore Niépce y, como ocurre siempre, a punto estuvo de olvidarse su contribución a la fotografía, ya que Daguerre intentó ocultar el papel que Niépce jugó. La Familia de Niépce actúo rápido y reclamó el sitio que le pertenecía a Niépce en la historia de la fotografía.
En 1839 Talbolt y Daguerre hacen públicos sus descubrimientos. Sir John Herschell llama al invento fotografía (del griego, Luz y Escritura, o sea, el arte de escribir con la luz). Daguerre vende su invento al gobierno francés y en poco tiempo se hace muy popular entre la burguesía. No de extrañar, en un mundo ya capitalista, la fotografía permitía realizar un retrato de forma más económica y rápida que la pintura tradicional.
Durante los años 40 del s. XIX, la fotografía se expandió por todo el mundo. Con la popularidad de la fotografía, la pintura quedó en un segundo plano; por ello, para sobrevivir llegó el Vanguardismo con unos estilos que, en principio, se pensó que la fotografía nunca podría concebir.
La fotografía pasa a ser una actividad comercial. Gaspard-Félix Tournachon, más conocido como Nadar, realiza retratos psicológicos y las primeras fotografías aéreas. Las cámaras oscuras van desarrollándose, así como sus ópticas y sus objetivos.
En 1851, Frederick Scott Archer sustituye las técnicas de revelado de Daguerre, ya que su nueva técnica consigue una mayor nitidez y reproducción de tonos en las fotos.
Este nuevo sistema se empleó durante conflictos y guerras de aquellos años y destacan Roger Fenton, precursor de la fotografía de guerra y Mathew Brady. Sin embargo, se trató de fotografías propagandísticas de los estados, no denuncias de los horrores de una guerra.
Durante la segunda mitad del s. XIX proliferan los estudios fotográficos. La tendencia era los retratos realistas, pero también hubo fotógrafos que retocaban sus instantáneas para reivindicar la intervención del autor y la exclusividad de la obra, dos puntos alegados por los pintores de la época para negar la categoría de arte a la fotografía. Para los pintores cualquiera podía pulsar el “botón” y hacer una fotografía.
En 1871 se perfecciona el revelado sin necesidad de que el negativo tenga que pasar por tantos procesos que requerían laboriosas técnicas y líquidos. Se reduce el tiempo de exposición a 1/25 de segundo. La fotografía va abandonando el terreno profesional.
Desde Nueva York, en 1884, George Eastman patenta la película fotográfica, “el carrete”, y lo llamó American Film. En 1888, registra la marca “Kodak” naciendo así las tradicionales tiendas fotográficas donde se llevaba la cámara de foto con un carrete de 100 tiradas y se revelaban. La fotografía estaba al alcance de muchísimos curiosos.
SIGLO XX
La fotografía pasa a la vida diaria de miles de personas en el mundo; se desarrolla en todas sus vertientes: fotoperiodismo, fotografía publicitaria, fotografía social, fotografía como expresión artística, etc.; se simplifica su uso y su adquisición es más económica; y se convierte en toda una afición.
En 1926, nace la cámara de 35 mm (Leika). Usa la misma película que el cine. En los años 30 se desarrolla la lámpara de flash de magnesio dando libertad casi total a los fotoperiodistas. Robert Capa, Cartier-Bresson, Robert Doisneau o Alberto Korda, son unos ejemplos.
Las revistas y periódicos demandan grandes cantidades fotos para sus publicaciones que impulsa un nuevo fenómeno: el fotógrafo como celebridad. Erich Salomon, sería otro buen ejemplo.
Durante los años 30 se perfeccionan el flash y la introducción, aunque tímidamente, del color en la fotografía. La manejabilidad de las cámaras de foto facilita el arriesgado trabajo de fotografiar conflictos y guerras. Muchos fueron los fotógrafos que arriesgaron sus vidas incluso las perdieron desplegándose en guerras como la Guerra Civil española, la II Guerra Mundial o conflictos aislados durante la Guerra Fría.
En los años 40 del s. XX, cansados los fotógrafos de que los estados utilizaran la fotografía con fines propagandísticos, algunos de ellos, como Robert capa y Cartier-Bresson, fundaron la agencia Magnum en 1947. En ese mismo año, el físico Edwin Herbert Land inventa la película Polaroid.
Se acelera el desarrollo de la técnica de fabricación de las cámaras y los materiales fotosensibles. Durante la segunda mitad del s. XX, la fotografía es considerada como forma de arte y como sector productivo dentro del sector audiovisual.
SIGLO XXI
Las primeras cámaras digitales aparecen en los años 90 y no es hasta 2001 cuando se vendieron en el mundo más cámaras digitales que analógicas.
En los comienzos sólo los usuarios domésticos utilizaban las cámaras digitales dada su poca calidad, pero a medida que ha ido avanzando las tecnologías los fotoperiodistas y demás profesionales del sector han ido adoptándolas, entre otras cosas porque se eliminaba el proceso de revelado ahorrando tiempo y dinero.
Internet está siendo desde hace ya bastantes años un medio donde difundir los trabajos fotográficos tantos de profesionales como aficionados.