Por eso, cuando se presenta la ocasión de conocerlo, uno no debe desaprovecharla en todos los sentidos. Hace unos meses que todo me pillaba planificando un viaje a la ciudad de los tres nombres. Sus ciudadanos nacieron en Petesburgo, crecieron en Leningrado y ahora se jubilan en San Petesburgo. Y entre toda esa planificación estaba, sin duda, la exigencia de conocer más de cerca una historia que, no por muchas veces narrada, deja de ser apasionante. [seguir leyendo sobre Historia de Rusia en el siglo XX, de Robert Service].
Por eso, cuando se presenta la ocasión de conocerlo, uno no debe desaprovecharla en todos los sentidos. Hace unos meses que todo me pillaba planificando un viaje a la ciudad de los tres nombres. Sus ciudadanos nacieron en Petesburgo, crecieron en Leningrado y ahora se jubilan en San Petesburgo. Y entre toda esa planificación estaba, sin duda, la exigencia de conocer más de cerca una historia que, no por muchas veces narrada, deja de ser apasionante. [seguir leyendo sobre Historia de Rusia en el siglo XX, de Robert Service].