Historia de un plagio: los faros de Torre del Mar

Por Luciagleon @luciagleon

Recuperar la historia siempre es un hecho que tiene que ser bienvenido. Pero no todo vale a la hora de recuperar esa historia. Me refiero a algo que ha ocurrido recientemente en Torre del Mar. Aquí, en este núcleo de población de la Axarquía malagueña, se ha utilizado el trabajo de una persona para divulgar la historia de los faros de Torre del Mar sin que el artífice de unos paneles informativos se digne a citar la fuente de donde se extrae la información.

No es nada nueva la historia del plagio, pero se debería aprender ya de una vez a no despreciar el trabajo de nadie de una forma tan descarada y tan ruin. 

Y, desde luego, (que en eso estamos muy duchos últimamente), desprestigiar al autor, a través de las redes sociales, por el simple hecho de reivindicar la autoría de dicha investigación.

Me había marcado como meta no hablar de política y, menos, de política local. Pero en esta ocasión no me apetece callar. He visto y he sufrido muchos envites del Grupo Independiente Pro Municipio de Torre del Mar, grupo político que ha instalado los paneles a los que se hace referencia en este artículo, y quizás el airearlos iban a quedar en un cruce de acusaciones en los comentarios de un artículo o de una red social, pero en esta ocasión, los hechos a los que me refiero son fácilmente demostrables.

Ahora, pueden llamarme resentida, si quieren. O, mejor dicho, pueden llamarme lo que os venga en gana porque no me afecta. Ya me afectó una vez y estoy inmunizada. Decían de un alcalde, el que estaba en la legislatura anterior, que era egocéntrico y dictador. Tal vez, lo fuera, pero ustedes, desde su fortín marino están cometiendo los mismos errores narcisistas que antes veían y ahora no ven.

Y, simplemente, con este artículo quiero poner de manifiesto la autoría del trabajo de un compañero, Jesús Hurtado, que ustedes han despreciado por tener ese ansia de protagonismo que antaño criticaban. Y mostrar mi corporativismo en una profesión donde si eres crítico, te denuestan y no te dan trabajo. ¡Viva la libertad de expresión!