La antigüedad de su fundación queda constatada en los restos arqueológicos de tiempos prehistóricos. Estuvo poblada por íberos, romanos y árabes, pero su importancia histórica la alcanzaría en la Edad Media.
En el siglo XII existía el castillo del Tormón que quedó abandonado durante el reinado de Alfonso VII, edificándose en su lugar una iglesia donde la tradición popular indica como lugar de aparición de la Virgen del Castellar.
Por lo tanto, esta villa fue sede de tres encomiendas, la de Villarrubia cuyo gobernador era Don Juan de Borja, la de Villoria encomendada a Don Hernán Tello de Guzmán y la de Biezma a Don Pedro Padilla.
Poco después de la fundación de Villarrubia, se despoblaron Biezma y Villoria a favor de la primera, aunque sus territorios no se incorporaron hasta fechas posteriores, posiblemente en el siglo XVI.
En Biezma sólo quedaron la ermita en el lugar que ocupó el castillo del Tormón. Se cree que Villoria se despobló por la falta de agua dulce y en el siglo XVI aún existían algunas casas y su iglesia.
A principios del siglo XVIII, el lugar alto que ocupó el castillo del Tormón fue motivo de disuasión de las tropas del Archiduque que en número de 6.000 hombres al mando de Gallobay pretendía tomar Villarrubia. Aquellas supusieron fortificado el lugar y desistieron del ataque, atribuyendo los vecinos este hecho a la intercesión de la Virgen del Castellar
En 1712, Villarrubia contaba con 189 vecinos, creciendo a lo largo de este siglo la población hasta 521 que se censan en1787, lo que hace un total aproximado de 2.086 habitantes.
Fuente: Wikipedia