Ya sabéis que adoro la mezcla dulce-salado y soy incapaz de resistirme a cualquier receta con la que me encuentro que lleve aparejados ambos sabores unidos en ella. y dicho y hecho, esta maravilla de bocado la encontré en el blog de Laura (desconocido todo este tiempo por mí y que ahora miro y remiro todos los días).
- 2 manzanas golden.- 100 grms de queso gorgonzola u otra variedad de queso azul suave.- 6 nueces peladas y picadas fino.- 2 nueces peladas y picadas en trozos más grandes.- 2 cucharadas de mantequilla.- 1 cucharada sopera de azúcar moreno.- 1 lámina de hojaldre.- 1 huevo para pincelar el borde del hojaldre.
Preparación:
Pelaremos las manzanas, las descorazonaremos y cortaremos en dados. Las pondremos a fuego suave junto con la mantequilla y el azúcar moreno removiendo de vez en cuando. En aproximadamente 10 minutos tendremos las manzanas hechas. Probaremos un dado y si notamos que está tierno, sin necesidad de que esté del todo blando, retiramos el cazo del fuego y reservamos. Cortaremos el hojaldre en dos rectángulos iguales y en cada uno de ellos hacemos un marco con el cuchillo a 1,5cm del borde (solo lo marcaremos, no cortaremos). Pincelaremos con huevo la parte exterior del marco, tratando de no pincelar el interior. Introduciremos en el horno el hojaldre durante 10 minutos. A los 10 minutos lo sacaremos con cuidado y con ayuda de una espátula, empujaremos un poco hacia abajo la parte central que se habrá hinchado y colocaremos encima el queso, la manzana caramelizada y espolvoreamos con las nueces picadas. Dejaremos caer por encima las nueces picadas en trozos grandes e introduciremos en el horno aproximadamente otros 5 minutos, en los que veremos que el marco exterior del hojaldre se dora, el queso se funde y las nueces de la capa superior se caramelizan ligeramente. Servir templado.