Además de para dar la bienvenida a 2018, vengo a hablaros un poco de mis planes blogueros. Últimamente no me sobra el tiempo y el poco que tengo lo consumo leyendo, viendo películas o series. Mi primer propósito para este año recién estrenado es cambiar un poco el chip y volver a escribir con más regularidad. ¿Cuánto va a durar este propósito? No lo sé, pero al menos quiero intentarlo.
Para empezar con buen pie, voy a resetear y brevemente os voy a hablar de mis últimas lecturas de 2017...
'No soy un monstruo' (Carme Chaparro) ha sido el penúltimo thriller del año. La verdad es que tenía muchas ganas de sumergirme en esta historia, pero me decepcionó un poco. No por la historia en sí, que tiene ingredientes potenciales para una buena novela negra, más bien porque parece que es un encargo a la autora para que se convierta en serie o película. Muy visual, muy potente y con un final sorprendente, pero la parte humana de la historia (la vida de los protagonistas) se me ha quedado un poco corta. ¿Veremos una segunda parte que incida más en este aspecto? Ojalá.
'Big little lies' o 'Pequeñas mentiras' (Liane Moriarty) era una novela que estaba entre mi pila de eternos pendientes, nunca encontraba el momento de ponerme con esta historia... hasta que estrenaron la serie del año (seriaza, por cierto). Es justo decir leí el libro primero y que os lo recomiendo al 100%. Tiene de todo: protagonistas únicas, historias personales, una trama principal que empieza con una muerte, tramas paralelas... Una gozada de lectura.
'El cuento de la criada' (Margaret Atwood) llegó para sacudirme. También hay serie, pero todavía no la he visto, no sé si estoy preparada después de leer un libro tan bestial como este, un libro que abre tantos debates internos y que sobre todo, presenta situaciones que pueden ser totalmente verosímiles en un futuro no muy lejano (esperamos que no). Esta distopía está publicada en 1985, han pasado más de 30 años y está más de actualidad que nunca. No dejéis de leerla.
'Recursos Inhumanos' (Pierre Lemaitre) es la última novela negra que me ha regalado 2017. Como siempre que leo a Lemaitre, me espero de todo porque sé que ese todo me va a gustar. Este libro habla de la brutalidad del mercado laboral, habla del paro, de la desesperación y de la esperanza, y plantea un debate: ¿qué estaríamos dispuestos a hacer por conservar aquello que más queremos? Desde el primer capítulo se plantea una trama trepidante y, cuando llegamos al ecuador del libro, sabemos que habrá una gran "traca final", que así no se pueden quedar las cosas. A 2018 le pido más Lemaitre, nunca deja de sorprenderme.
Y hasta aquí 2017. Espero que 2018 nos depare muchas lecturas buenas y personajes inolvidables.