Bajo el lema, ¿Los hombres a cargo? Igualdad de género y derechos de los niños en las familias contemporáneas, la celebración del Día Internacional de la Familia, que se observa cada año el 15 de mayo desde 1994, tiene como objetivo promover la igualdad de género y los derechos de los niños en el contexto familiar. También hace hincapié en la prevención de la violencia doméstica mediante leyes y medidas de actuación justas.
Las Naciones Unidas reconocen y afirman la importancia de la familia como un lugar privilegiado para la educación y como el ámbito primario que brinda protección y seguridad al conjunto de los derechos de la infancia. La propia Convención de los Derechos del Niño (1989) reconoce el derecho de todos los niños y niñas a vivir con sus padres, y a no sufrir injerencias en su ámbito familiar.
Y sin embargo, muchos niños y niñas se ven privados de derechos básicos vinculados a sus familias, como el derecho a tener un nombre y un apellido de sus padres y a ser inscritos en el registro civil. Según estiman organizaciones como Unicef, alrededor de 51 millones de nacimientos no quedan registrados al año en los países en vías de desarrollo, con lo que estos niños se ven privados ya desde su nacimiento de derechos básicos como la identidad legal, la salud pública y la educación.
La persistencia del machismo y la inequidad de género en prácticamente todas las sociedades están en el fondo de este interrogante que se plantea en el lema de la celebración del Día Internacional de la Familia. ¿Están los hombres por la labor de desprenderse de los estereotipos machistas y ejercer su corresponsabilidad en el seno de su familia y para la educación de sus hijos?
Pese a los avances en la educación sobre género, las conductas machistas están fuertemente arraigadas. De acuerdo con los últimos estudios publicados en España, un 29% de los jóvenes dicen conocer a alguna víctima de violencia de género y un 25,1% de las chicas reconocen haber sufrido control a través del móvil. A ellas se dirige la última campaña de sensibilización del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Hay Salida.
En el ámbito de la violencia sexual y los embarazos no deseados, Naciones Unidas recuerda que todos los años, 7,3 millones de niñas menores de 18 años dan a luz. La mayoría de estos embarazos son consecuencia de factores como la pobreza y la aceptación social del matrimonio infantil, y están agravados a menudo por la segregación secular que afecta a las minorías indígenas. Sin embargo, a través de la salud reproductiva y el respeto de los derechos humanos, puede lograrse que cada embarazo sea deseado.
Los hombres pueden y deben formar parte de las familias comprometidas con los derechos de la infancia: la fórmula para lograrlo es compleja pero conocida: combina la educación en la corresponsabilidad, el acceso equitativo de hombres y mujeres a la educación, una protección legal y jurídica de mujeres y niños frente a la violencia y las mejoras legislativas en la conciliación laboral de hombres y mujeres, entre otros factores.