Mucho se escribió de aquella salida del equipo blanco en el que batió récords y forjó un inquebrantable mito. El club excusó la ausencia de un reconocimiento argumentando que su carrera como jugador no había terminado. Mientras, los más críticos defendieron que detrás de todo se escondía una eventual mala relación con Florentino Pérez, presidente de la entidad.
Lo único incuestionable es que no se pudo despedir de su hinchada el jugador con más partidos disputados en la historia del Real Madrid (741) y con más goles anotados (324), entre otros muchos récords. Ahora, pasado el tiempo, el club ‘merengue’ pretende saldar cuentas. Aunque todavía queda espacio para la polémica: en los carteles promocionales del evento no apareció ni una sola imagen del excapitán. Extraño, y más teniendo en cuenta que su sola presencia sirvió para asegurar el lleno por primera vez en muchos años en el trofeo, tan devaluado últimamente.
Raúl jugará los primeros 45 minutos con el Al Sadd y tras el descanso cambiará de equipo para vestir la camiseta del Real Madrid por primera vez desde el 24 de abril de 2010. Será un momento tremendamente emotivo.
«Sé que todas las entradas están vendidas. Se lo agradezco a toda la afición. Espero que sea una gran noche y que disfruten con el partido. Va a ser especial para mí jugar una parte con cada camiseta», declaró el exjugador blanco.