Homine ex machina es una novela futurista y de ciencia ficción en la que Carlos Sisí, toda una eminencia de la literatura de este género, así como de la fantasía y el terror, analiza qué podría pasar si la toma de decisiones y otras cuestiones se dejara en manos de una Inteligencia Artificial. Si bien es cierto que llevaba un tiempo alejada de la obra de este gran escritor (a pesar de que hasta hace no mucho seguía muy de cerca sus publicaciones, porque me encanta), hace nada decidí que era hora de retomarla, siendo la elegida para empezar Homine ex machina, precisamente por lo mucho que está de actualidad el tema de la Inteligencia Artificial o IA, con todo lo que está pasando con su uso cada vez más popularizado. ¿Qué pensará Carlos Sisí de esta polémica tecnología?
En esta novela ficticia pero no exenta de un visión analítica y crítica, Sisí nos presenta un futuro bastante cercano en el que la ingeniera Annabel Bachelor crea Cónclave, una IA destinada a recabar toda la información existente en la Red para ser de utilidad al ser humano, sobre todo en el ámbito académico. Lejos de ser el típico robot automatizado, Cónclave tiene la capacidad de aprender y desarrollar un criterio propio, observando y analizando el comportamiento del hombre en todo momento, lo que lleva a Annabel a fascinarse y asustarse a partes iguales, ante la posibilidad de que esta IA pueda tomar conciencia total de sí misma y destinar su poder a hacer el mal. Sin embargo, con el pasar de los años, Cónclave va siendo utilizada por la empresa que la financia para diferentes objetivos, como programar robots soldados que decidirán el curso de la guerra contra China; servir a la ciudadanía como policía o en el ámbito doméstico, e incluso lanzando al mundo un juego hiperrealista que va más allá de lo nunca imaginado. Y mucho más que no voy a desvelar en esta reseña…
Homine ex machina, además de ser una novela muy entretenida de ficción, está llena de reflexiones acerca del papel de la Inteligencia Artificial y las cuestiones morales que puede plantear para el ser humano, tanto positivas como negativas. Con claras referencias a la obra de Asimov, pero también lleno de guiños a novelas como Ready player one o El problema de los tres cuerpos, este libro es toda una delicia para los que disfrutamos con este tipo de historias imaginativas que, por si fuera poco, ponen sobre la mesa algo que podría ser muy real y no tan lejano como cabría esperar.
Por supuesto, ni que decir tiene que te recomiendo totalmente la obra de Carlos Sisí (si todavía no la conoces), y te urjo a que te decantes primero por su saga sobre zombis Los caminantes y su trilogía vampírica Rojo, sin pasar por alto grandes novelas como Nigromante. Desde luego, por mi blog vas a encontrar mucho de este autor tanto en entradas anteriores, como futuras. ¡No te pierdas nada del señor Sisí!