Honduras: A ocho años de dictadura la juventud sigue combativa

Publicado el 04 diciembre 2017 por Norelys @norelysmorales

Rodolfo Cortés Calderón.─ Cuando el Golpe de Estado del 2009, los oligarcas militares, políticos, empresarios y religiosos creyeron que eran los mismos tiempos de los años 60s y 70s y que el pueblo aceptó con sumisión y resignación los golpes de Estado. Pero se equivocaron. Me agrada la expresión de los jóvenes modernos cuando los escucho decir: ¨Se metieron con la generación equivocada¨.
Hagamos un recuento histórico de lo sucedido: Desde el 2009 hasta los años 2010 y 2011 hubo un cúmulo de manifestaciones después del golpe. Algunas superaron el millón sólo en Tegucigalpa, sin contar los millares de personas que se movilizaron perseverantemente en varias ciudades a nivel nacional, todas exigiendo el restablecimiento del orden constitucional y contra la dictadura impuesta. Hubo mucha represión y asesinatos políticos durante el impuesto, efímero y represor gobierno de Roberto Micheletty Bain y vel posterior gobierno de Porfirio Lobo Sosa (2010-2014).

En enero 2014 después del horroroso fraude hecho por el Partido Nacional, asume la presidencia el nefasto nacionalista Juan Orlando Hernández, JOH. Ese año coincide con grandes movilizaciones de la juventud de los colegios de educación media en apoyo a los afectados maestros por el saqueo del INPREMA y la destrucción de los Colegios Magisteriales y en exigencia de una mayor atención del Estado para los centros educativos. También hubo mucha represión y asesinato de adolescentes estudiantes. De esta forma y causas va gestándose un arrollador movimiento denominado de Las Antorchas, también conocido como Los Indignados.

Se presume que el Partido Anticorrupción, PAC, fue el gestor de este movimiento. Todos los viernes desde mayo del 2015 la juventud fue convocada a protestar contra el régimen de Hernández y contra sus arbitrarias y neoliberales medidas antisociales y antieconómicas.

Las de las antorchas fueron unas sendas movilizaciones que reunían semanalmente no menos de 100 mil indignados solo en Tegucigalpa, sin contar más de una decena de ciudades a nivel nacional, la mayoría jóvenes de clase media: estudiantes, universitarios y obreros. Ellos y ellas mismas solicitaron a los politiqueros tradicionales no contaminar con su sucia presencia su movimiento, que indudablemente les atrajo muchos enemigos de la politiquería mediática y empresarial a quienes los jóvenes acusaban de ser los causantes de la crisis derivada del golpe de 2009.

En 2016, por dos frentes diversos, se plantea la lucha de los estudiantes universitarios; la primera, teniendo como sede a los estudiantes de la Universidad Nacional de Agricultura, UNA, en el alejado departamento de Olancho y la otra a los estudiantes, unos 60.000, de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH, que se organiza en torno al combativo Movimiento Estudiantil Universitario, MEU, que ha sido el más grande dolor de cabeza del régimen entreguista de Hernández también conocido como JOH, con su malintencionada intención de privatizar la educación en todos sus niveles y la intromisión de JOH en la Reforma Universitaria. El año 2017 los dos movimientos salen ¨victoriosos¨, aunque con diferentes variantes, pero afectados más de 50 jóvenes de parte de la ex rectora Julieta Castellanos Ruiz que les criminaliza.

En las elecciones del 2013 los jóvenes mostraron un novedoso respaldo al neófito político y presentador de televisión Salvador Alejandro Nasralla Salum con su Partido Anticorrupción, PAC, que de manera histórica quedó en cuarto lugar, seguido del tradicional partido LIBERAL. El Partido Nacional de manera fraudulenta ganó la elección presidencial y el también novel partido Libertad y Refundación, LIBRE, quedó en segundo.

Así las cosas, para 2017 se entra a un nuevo proceso electoral teniendo como gobierno a un impopular y señalado abiertamente por corrupto Juan Orlando Hernández, que de manera ilegal e inconstitucional se propone para la reelección.

Para lograr la reelección Hernández alinea a su favor todas las instituciones del Estado y para restar fuerza al ya perfilado candidato del PAC, Salvador Nasralla, utiliza la Corte Suprema y lo despoja del partido que había fundado. El partido LIBRE, segunda fuerza política del país ve una buena oportunidad para restarle fuerza a Hernández y se une con Nasralla, ya despojado del PAC y le ofrece la candidatura presidencial para las elecciones generales de noviembre 2017. Así surge la Alianza contra la Dictadura.

Se llega al momento electoral del pasado domingo 26 de noviembre y el Tribunal Supremo Electoral ¨secuestrado¨ por Hernández de una manera descarada y maliciosa le roba las elecciones a Salvador Nasralla y hoy después de 8 días de realizadas no se conocen los resultados generales, ni se sabe quién es el nuevo Presidente de Honduras, después de que en la madrugada del lunes 27 de noviembre el presidente del TSE diera a Nasralla un triunfo con el 5% sobre su contendor Hernández.

La semana posterior a las elecciones del 26 la sociedad hondureña, por la irresponsabilidad del TSE, sufrió una tremenda convulsión social a nivel nacional y el 1 de diciembre el gobierno impopular de JOH impuso un toque de queda, de 6 p.m. a 6 a.m. donde suspendió gran parte de las garantías constitucionales. Aun así, esa misma noche la Alianza contra la Dictadura propuso enfrentar con no violencia activa, NVA, la dictadura y su toque de queda y la noche del 2 hubo millares de movilizaciones internas en los barrios o colonias y de esta manera todas las noches se sigue enfrentando a la dictadura con movilizaciones, cohetes, música y cacerolazos.


Pero el domingo 3, el pueblo rebasó los límites con inmensas movilizaciones que aglutinaron más de UN MILLÓN de personas en una veintena de ciudades de Honduras, sólo las de Tegucigalpa y San Pedro Sula aglutinaron más de 400 mil indignados, pero aun así el TSE sigue engañando al pueblo con la terquedad del conteo de votos a su manera, aun cuando la Alianza determinó no participar en el mismo por la no aceptación de su propuesta de revisar más de 5000 actas electorales supuestamente fraudulentas. Estamos en tensa espera.

¡Así están las cosas en esta sufrida Honduras, donde los Organismos Internacionales se han vuelto cómplices del fraude y respondiendo a los dictados del imperialismo mundial!

https://www.alainet.org/es/articulo/189622