Avenida Damián Téllez Lafuente 15
06010 Badajoz
Habitación: 125 Fecha de entrada: 30/10/2017 Tarifa: 71€ (A+D) Un edificio de curiosa arquitectura, con un torreón con el logo del hotel, en tonos grises y con ventanas oscuras de cristales algo tintados. Distintos niveles de altura, una terraza con una piscina y un gran pórtico algo laberíntico delante de la puerta giratoria de entrada para estacionar el vehículo y permitir la descarga de pasajeros y equipajes. Ubicado en una de las avenidas exteriores de acceso a la ciudad, aunque no lejos del centro. Tras la enorme puerta giratoria, de cristal entramos en una amplia recepción. Aunque las paredes son de cristal, el pórtico de la entrada mitiga mucho la luz en el interior y la sensación es un poco triste y aburrida. Hacia la derecha encontramos una zona con varios sofás, butacas en tonos claros con mesas en el centro. Para esperar, o para charlar un rato. Justo enfrente está el mostrador de recepción, en madera rojiza, semicircular. Más hacia la derecha y al fondo del espacio una bonita escalera de caracol con barandilla plateada en mármol color arena, los ascensores, la cafetería, cerrada con unas paredes de cristal, y un pasillo que lleva al gimnasio y al salón de desayunos. En el mostrador no tenemos suerte. No encuentran nuestro nombre por ningún lado. Le indico a la joven que atiende que quizá esté con mi segundo apellido. Tampoco. Ella no puede hacer nada, dice. Le digo, vaya a la pantalla X y ponga mi nombre, así verá todas las reservas que hay hechas para mí, y veremos si es que se han equivocado de fecha. Efectivamente. Me esperaban un mes más tarde. Luego pide los documentos, aunque cuando empieza a copiarlos, el sistema le dice que ya he estado alojado en la Cadena. Nos asigna la habitación y nos da un papelito para un descuento en el restaurante. Nos explica el funcionamiento del wifi, que es gratuito, y funciona a la perfección en todo el edificio. Los ascensores quedan detrás de la escalera de caracol. Son dos. Modernos, limpios, con luces tenues. La botonadura bien cuidada indica lo que hay en cada planta. Un espejo algo oscuro y un par de carteles coloristas con los servicios del hotel.Las puertas se abren en un amplio recibidor al que llegan varios pasillos con las habitaciones y el final de la escalera. Una enorme claraboya en el techo deja pasar la luz natural algo tamizada. Paredes en tonos arena, moqueta rosa (algo desgastada) en el suelo y puertas en madera rojiza y en ella, los números metálicos de las habitaciones.
Servicio: 8
Ambiente: 6.5
Habitación: 7.5
Baño: 7
Estado de conservación: 7.5
Desayuno: 7.5
Valoración General: 7.5