HOTEL SAN LUIS LINDAVISTA (*****)Río Sinaloa 1, Guadalupe80220 Culiacán Rosales, Sinaloa (México)
Habitación: 528Fecha de entrada: 16/10/2023Tarifa:
En el centro de la capital sinaloense, desparramado por el cerro más famoso de la ciudad (La Lomita) hallamos un enorme complejo en piedra color marrón envuelto en exuberante vegetación. Hasta ocho alturas en distintos edificios que parten de distintos niveles y que terminan en la cima de la loma, junto a un formidable santuario mariano. Desde la calle hay un doble acceso, por un lado el peatonal, salvando cuatro escaloncitos, y por otro lado un acceso a ras de suelo desde una pequeña zona de parking semi subterráneo. En ambos casos hemos de tirar de una puerta de cristal con pomo metálico para acceder a una cuadrada recepción, de paredes acristaladas a la calle y a la zona de recogida en vehículo. Suelo negro de mármol, techo altísimo. Luces algo frías. A la izquierda hay una zona de sofás para la espera o la tertulia y una mesa en la que se sirve como bebida de bienvenida agua fría y café. En el lado de la derecha hay una elegante escalera curva con pasamanos dorado y barandilla de forja. A los pies de la misma, una máquina lustrazapatos. En el centro, una mesa redonda con un enorme jarrón con una decoración vegetal. Tras ella, empotrado en la pared de elegante madera oscura, el mostrador de recepción. En él un simpático empleado nos atiende de forma rápida y eficaz. Nos explica los servicios del hotel, nos indica la clave del wifi que es gratuito en todo el hotel, aunque a veces se corta, y nos entrega una cartulina con una tarjeta de plástico blanca sin personalizar que hace las veces de llave de la habitación. Las luces hacen el espacio algo oscuro y la sensación general es de cierta elegancia clásica. Quizá demasiado clásica.Salimos hacia la izquierda, pasando junto a una hornacina en la que hay una lámpara, un teléfono y una pequeña planta. Atravesamos una puerta de cristal y salimos a una pequeña y calurosa zona de aparcamiento, en la que hay media docena de vehículos. A la derecha, al fondo encontramos otra puerta iluminada con un cartel que anuncia un ascensor. Abrimos de nuevo la puerta de cristal y accedemos a un recibidor con unas escaleras protegidas con una alfombra de colores y un ascensor de puertas metálicas con un punto vintage. A su lado hay una papelera y un cartel metálico en la pared en el que se indica la ubicación de los distintos servicios del hotel (parking, piscina, restaurantes...). El interior del ascensor es en parte panorámico, con vistas hacia la ciudad a nuestros pies. Las dos paredes laterales son de espejo y la botonadura metálica. Las puertas se abren a otro recibidor al que también llegan las escaleras, y a la derecha se abre el pasillo con las habitaciones.Moqueta color salmón en el suelo, puertas de madera clara con unos carteles metálicos en dorado y verde que indican el número de las habitaciones. En el lado derecho, un larguísimo ventanal con vistas a los jardines colindantes al hotel aquí, y a la ciudad, allá. Demasiado calor, porque la zona no está climatizada. Acercamos la tarjeta a una zona negra que hay en el metálico pomo, y se abre la puerta. El calor del pasillo contrasta con el frescor de la habitación en la que está encendido el aire acondicionado, algo ruidoso, pero que funciona eficazmente manejado desde un sencillo y antiguo display con un botón para encendido y apagado, una pantalla para seleccionar la temperatura deseada y un botón con tres opciones de potencia. La moqueta salmón del pasillo muta en moqueta marrón clara, bastante limpia y cuidada. A la derecha un interruptor iluminado sirve para activar las luces de la habitación. A continuación las puertas de madera clara con algunas molduras que acogen el generoso armario. En su interior un largo y algo colgador con media docena de perchas antirrobo, una balda por encima en la que encontramos un par de almohadas de recambio, la bolsa de la lavandería, una plancha y un albornoz mullido aunque algo pequeño (especialmente para los que somos de talla XXL). Anclada a la pared interior del armario, la tabla de planchar.
Ambiente: 7
Habitación: 8.5
Baño: 7.5
Estado de conservación: 7.5
Desayuno:
Valoración General: 8