Director: André de Toth
Luego de la película de Michael Curtiz había que ver el remake dirigido por André de Toth veinte años después. "House of Wax", si no me equivoco, es una película en 3-D, tecnología que de Toth nunca pudo disfrutar porque tenía un solo ojo (deberían inventar tecnología 3-D inclusiva: ¡¿hasta cuándo con la discriminación?!). Algo me dice que yo tampoco podría apreciar completamente el 3-D en una película, de hecho me da la sensación de que me dolería la cabeza y no podría disfrutar de la historia. Así en 2-D tampoco es posible disfrutar de una película tan fallida e inútil. Qué importa la tecnología cuando la película misma es la que decepciona. A todo esto, siempre recuerdo los reproches de un compañero de universidad que, cuando recién comenzaba el blog, convencido que el único crítico bueno es
"House of Wax" es un remake en el peor y más superfluo e innecesario sentido de la palabra. A grandes rasgos es la misma historia que la narrada en "Mystery of the Wax Museum", pero con absurdas y contraproducentes variaciones que, si bien en un inicio parecían querer dar algo de "orden" al relato de Curtiz, luego de la escena del incendio pierden todo atisbo de lógica y sentido común de una manera increíblemente abrupta, convirtiendo el filme en un absoluto despropósito sin pies ni cabeza.
"House of Wax" no sólo es mala comparándola con la original, sino que también lo es atendiendo a sus propias y más que cuestionables decisiones narrativo-dramáticas. No quiero entrar en detalles porque no vale la pena, pero cada decisión del guión aniquila por completo el suspenso de la historia explicitando la naturaleza de las figuras de cera de inmediato; tempranamente revela la identidad de personajes (como el hombre desfigurado) cuya gracia era el carácter incógnito y desconocido para el público, el efecto ambiguo que ejercía sobre el espectador; simplifica hasta el insulto el aspecto policial-investigativo de la trama (¡ofertón narrativo: lleve 3 personajes por el precio de uno! ...el producto no garantiza que el personaje "3 en 1" ofrezca la misma calidad que se obtendría con cada personaje por separado...), prefiriendo que someras intuiciones y corazonadas guíen el relato en lugar de la extrañeza que provocan una serie de sucesos rara y sospechosamente relacionados; desprecia la ágil y sugerente narrativa de misterio en pos de una chapucera sucesión de inconexas escenas de "terror" (persecuciones que no llegan a ningún lado, acechos a medias, encuentros forzados...); reduce los personajes a meros instrumentos que impulsan el argumento (en vez de tratarlos como entidades cuyas acciones responden a motivaciones definidas, convincentes y coherentes consigo mismos y para con la narración); y así podría continuar largo rato. Esta versión carece del encanto, el desenfado y la solvencia del film original: es una historia descafeinada, sin ideas, inofensiva, y yo no comprendo el porqué de tanta aclamación y culto a su alrededor, si la de Curtiz es infinitamente mejor. Ni siquiera la presencia de Vincent Price logra revitalizar una película sin chispa ni arrojo, que solamente queda en un banal y anodino cúmulo de lugares comunes y vulgares golpes de efecto. ¿Y el 3-D? Bueno, le sacaron jugo en una escena donde un sujeto salido de la nada juega con un pádelbol que apunta a la cámara...
¿Lo bueno? La escena del incendio y la inauguración de la casa de cera, con la respectiva exposición de las figuras y el salón del horror. ¿El resto? Innecesario e inenarrable. Prefieran la de Curtiz.
Y les aclaro que la versión de Jaume Collet-Serra no viene en el pack... quiero decir plan: no venía en el plan.
...¿para cuándo la figura de cera de Hitomi Tanaka?...