Hoy es el mejor día para volver a ver Beginners

Publicado el 27 junio 2015 por Dante85 @_jesus_aleman

Lorena Alemán

Beginners (Principiantes) es una película independiente dirigida en 2010 por Mike Mills y protagonizada por Ewan McGregor, Christopher Plummer y Mélanie Laurent. En su estreno fue descrita como una obra “embriagadora y sincera”, que además está basada en la vida real del padre de Mills, quien se declaró homosexual a la edad de 75 años, cinco antes de su muerte.

La historia de Beginners se inicia con el fallecimiento de Hal (Plummer), el padre de Oliver (McGregor). Después de toda una vida junto a su madre, a la edad de 75 años Hal le confiesa a Oliver que es gay, que siempre lo ha sido y que quiere comenzar a vivir como tal. Hal se enamora de un joven cuarenta años menor que él y comienzan una relación sentimental, ante la mirada desconcertada aunque respetuosa de Oliver. Sin embargo, poco después se interpone en el camino de Hal un cáncer que le arrebatará la vida cinco años después, provocando en su hijo infinidad de sensaciones y recuerdos que le harán replantearse su vida bajo otro punto de vista.

A partir de entonces, se establece una nueva conexión entre Oliver y su padre, instaurada por la presencia de Arthur (Cosmo), el jack russell de Hal, que sin duda es el que más comparte con Oliver el dolor por su ausencia. De hecho, la empatía que surge entre Oliver y el perro supone una pieza clave para el desarrollo de la trama, además de un recurso sumamente emotivo, que ofrecerá más de una entrañable escena.

En compañía de Arthur e incitado por sus amigos, el joven asiste a una fiesta donde conoce a Anna (Laurent), una actriz francesa de la que se va enamorando pese a intentar eludirla por todos los medios. Las enseñanzas de su padre interfieren irremediablemente en su relación con Anna, tan emocionalmente inestable como la que él tenía, y sus recuerdos le hacen vivir de una manera distinta esas nuevas sensaciones.

Lección de historia, lección de humanidad

Evan McGregor ha sido intérprete de memorables largometrajes, además muy reconocidos, como Trainspotting (Boyle, 1996), Star Wars (I, II, III), Moulin Rouge! (Luhrmann, 2001) o Big Fish (Burton, 2003), una espectacular y emotiva historia en la que también se relatan las heroicidades del padre del protagonista. A su vez, Anna es interpretada por Mélanie Laurent, actriz francesa conocida por ser la heroica vengadora de los judíos en Malditos Bastardos (Tarantino, 2009); y por su impresionante interpretación en El concierto (Mihaileanu, 2009), para cuyo papel aprendió a tocar el violín de forma asombrosa.

Pero no hay duda de que la presencia estelar en Beginners es la de Christopher Plummer (padre de la actriz Amanda Plummer), que a lo largo de su extensa carrera ha aparecido en películas como Doce monos (Gilliam, 1996), Una mente maravillosa (Howard, 2001), Alexander (Stone, 2004), El nuevo mundo (Malick, 2005), Plan oculto (Lee, 2006) o Millennium (Fincher, 2011). En 2011, Plummer recibió el Oscar a Mejor actor de reparto por su interpretación en Beginners.

Hal representa a todos aquellos LGTB que vivieron oprimidos y torturados a lo largo del siglo XX, a los que no lo contaron y a los que actualmente, en pleno siglo XXI, aún tienen la desgracia de contarlo. A través de continuos flashbacks, Oliver ejerce el papel de narrador para relatarnos la historia de su padre, sobre la relación entre ambos hasta sus últimos días de vida; pero también sobre cómo tuvo que someterse a la represión en su adolescencia y cómo se aferró a la única solución que le ofrecía la sociedad de la época: casarse con una mujer para ocultar su verdadera orientación sexual.

Tras morir su esposa y madre de Oliver, Hal se siente con derecho a emprender una nueva forma de vida: “no quiero ser gay solo en teoría”, dice. A sus 75 años, quiere comenzar a vivir como hubiera querido hace más de cuarenta años, empezar a ser quien siempre quiso ser. Porque nunca es tarde, asegura, porque se siente joven y con fuerzas, y no quiere morir sin experimentar y beneficiarse de la lucha de quienes sí tuvieron el valor para enfrentarse al miedo. Ahora Hal es libre, un principiante en un tiempo y sociedad libres.

Una de las cualidades más destacables de su personaje es su admirable optimismo, creciente incluso cuando su anhelado despertar tiene fecha de desenlace. Poco tiempo ha tenido Hal para disfrutar de su libertad, tan solo cinco años en los que, sin embargo, fue un ejemplo para todos los que conocía; en especial para Oliver, a quien, sin saberlo —o quizá sabiéndolo—, dio una lección de vida que jamás olvidaría.


—¿Por qué les dices que lo peor ya ha pasado? Tienes un cáncer en estadio cuatro.
—No es tan malo como parece.
—Papa, no existe el estadio cinco.
—No quiere decir eso.
—Y ¿qué quiere decir?
—Quiere decir que ha pasado por otros tres estadios.


La historia de Hal es una simple excusa para dar un repaso por los antecedentes del Orgullo LGTB. En cierto modo, la película supone en sí misma un fascinante recorrido por los hitos del movimiento homosexual y por la evolución de los derechos humanos que, a lo largo del siglo XX, diversas figuras del ámbito político y literario llevaron a cabo frente a todas las adversidades. De este modo, nos recuerda la lucha infatigable de Harvey Milk, el primer político abiertamente gay de EEUU cuyo activismo logró alzar los derechos de su bandera, y que en 1978 fue asesinado por ello, como se ve en el film Mi nombre es Harvey Milk (Van Sant, 2008). Beginners muestra además la otra cara de una sociedad donde las figuras literarias más relevantes se reunían clandestinamente en locales y bajos suburbios para compartir sus planes progresistas y, en algunos casos, sus deseos sexuales. Nos acerca así al imaginario de Allen Ginsberg con la lectura de su poema “Aullido”, escrito entre las cuatro paredes de un zulo en Nueva York; y también al cuento de Margery Williams sobre un peluche que quería ser real, El conejo de terciopelo, con un fragmento que el padre de Oliver imprimió y colgó en la pared.


—¿Qué es ser real? —preguntó el conejo—. ¿Y eso duele? —preguntó el conejo.
—Algunas veces —contestó el caballo.
—¿Y eso sucede de repente?
—No sucede de repente, te vas convirtiendo lentamente, generalmente cuando te has hecho real ya no tienes pelo, has perdido los ojos, tienes las articulaciones flojas y estás muy usado. Pero nada de eso tiene importancia, porque cuando eres real no puedes ser feo, excepto para la gente que no comprende.


Beginners es todo un homenaje a quienes hoy tienen el valor de clavar una colorida bandera en el territorio que conquistan. Pero, sobre todo, es un homenaje a todos los seres que no tuvieron la oportunidad de ser reales, a aquellos que perecieron siendo solo peluches, marionetas sin voz ni voto, víctimas de quienes “no comprenden”. Hoy millones de personas gritan por los que no pudieron disfrutar del sexo, la vida, los sentimientos, la luz del sol, la naturaleza, la magia, la tranquilidad, el espíritu. Hoy todos somos Hal.

¿Te ha gustado el artículo de iMovilizate?, Síguenos en Twitter y Facebook y ayúdanos a su difusión compartiéndolo con tus amigos en Twitter, Facebook, o G+ con los botones que encontrarás al final del artículo. ¡Gracias!

Esta entrada Hoy es el mejor día para volver a ver Beginners es contenido del blog iMovilizate - Smartphone, Tecnología y mucho más..