En la categoría de Mejor Película, a pesar de tener ahora diez competidoras, la lucha por la estatuilla más importante se centra en dos largometrajes, ambos con nueve nominaciones: Avatar y Zona de Miedo. El súper éxito comercial que la mayoría da como ganador tiene como principal obstáculo una cinta independiente ante la cual la crítica anglosajona se ha rendido. Por un lado, Avatar ha sabido promocionarse como la súper producción que cambió la historia del Cine con sus prodigios técnicos, además de ganar el Globo de Oro.
No obstante, tiene en su contra que nunca antes un film de ciencia-ficción ha ganado en esta categoría, y el hecho de no tener ni a sus actores ni a su guión entre los nominados. Por el otro lado, Zona de Miedo ha sido elegida la mejor película del año pasado por casi todas las asociaciones de críticos de EE.UU. y hace unos días derrotó a Avatar en los premios Bafta, logros que podrían ser indicios de su victoria final.
Acerca de quién será elegido el Mejor Actor, todo parece estar definido: Jeff Bridges ha acaparado esta temporada todas las distinciones que se consideran la antesala al Óscar, así que su consagración definitiva, luego de cuatro nominaciones previas, le llegaría gracias al cantante country en decadencia que encarna en Crazy Heart.
Sobre los actores secundarios, es prácticamente un hecho que serán el actor austriaco Christoph Waltz y la comediante Mo’Nique quienes se lleven un Óscar a casa, gracias a sus extraordinarias interpretaciones en Bastardos Sin Gloria y Preciosa, respectivamente.
Y acerca de lo que realmente nos interesa a todos, las posibilidades de La Teta Asustada como Mejor Película Extranjera, solo podemos recordar que tendrá dos durísimas contrincantes en la alemana La Cinta Blanca, la favorita para los entendidos, y la argentina El Secreto de sus Ojos, que ya derrotó a La Teta en los premios Goya. En todo caso, las posibilidades de la producción nacional no son pocas en una de las categorías más impredecibles de esta premiación, así que a cruzar los dedos se ha dicho.
Por lo demás, no queda mucho margen para las sorpresas en la octogésima-segunda entrega del Oscar, algo que se ha hecho habitual entrega del Oscar, algo que se ha hecho habitual en este importante evento. Solo nos queda esperar mucha emoción por parte de los ganadores, una conducción acertada y divertida por parte de Steve Martin y Alec Baldwin, y que el espectáculo esté a la altura de la noche más esperada del Cine.