Los chicos corrian de un lado al otro con estrellitas encendidas. Mientras ellos se abrazaban bajo la lluvia de luces. Un beso lleno de pasion y un abrazo que sellaba la unión de Verónica y Martín. Ella se acerco a su oido para susurrarle lo que nacia de su corazón.
-Feliz año nuevo. Gracias por esta familia hermosa que me diste.
-Gracias por ser única. Feliz año, te amo -se acerca a su boca y la besa con pasión-
Un beep interrumpe el acto mas romántico. Es el celular de Vero, su pantalla se ilumina. Ya empezaron a llegar las llamadas. Su cara inevitablemente se transforma al leer el visor y disimulando total naturalidad, le hace un gesto a Martín indicándole que iba a atender la llamada. A toda velocidad, se aparta entre los arboles del parque para contestar. Mientras ella se aleja, Martín observa feliz a sus dos hijos y se suma a correr tras ellos.
-Feliz Año a la mujer mas sexy de este planeta -aquella voz, la hace temblar- -¡Feliz año mi vida! Que sorpresa tu llamado. Crei que ibas a resistir marcar mi teléfono o que ibas a saludar mas tarde al teléfono de mi marido. -Vos sos irresistible. Es inevitable no pensar en vos. Las ganas que tengo de que estes aca al lado mio, en este balcón con una vista maravillosa, abrazados. Solo vos y yo -No me lo digas dos veces porque puede pasar cualquier cosa. Y lo sabes -entre risas- -Te lo digo mil veces, tengo ganas de vos. De nosotros. -Es solo un dia mas, ya vamos a poder aprovechar nuestro tiempo. Dame solo un dia mas. -Ya se. Voy a tener que guardar todas estas ganas para nuestro encuentro. ¿Tu marido a que hora se vuelve mañana? -Sale a la tarde. Asi que si todo va bien a la noche vamos a tener nuestra merecida cena. -Excelente. No sabes cuanta ansiedad tengo de ir directo al postre.De fondo se escucha un "Vero" que la trae a la realidad. Sus hijos estaban haciéndole señas y Martín esperaba que se sume a jugar. Resoplando, termina la conversación rápidamente
-Te tengo que cortar amor. Gracias por llamarme. Tu voz me relaja y me hace estar mas cerca tuyo. Te amo -Yo tambien hermosa. CuidateCorta la llamada y borra de la lista la ultima que recibio. Guarda su celular en el bolsillo del pantalon y camina hasta la otra punta para reincoporarse a sus hombres que la esperaban.
Martín la observa en silencio, pero con su enorme sonrisa, dibujada en su rostro. Brindandole total seguridad. Lo que Verónica no sabe es que tal vez, su marido este varios pasos mas adelante que ella y todavía no es momento de hacérselo saber. El tiempo lo dejara a la vista de todos y todo.
Verónica abraza a sus hijos. Dante y Rafael. Ellos se dejan estrujar por esos abrazos llenos de amor. Nada mas lindo que el abrazo de su mama. Martín parece observar de lejos aquella escena. Como un espectador, analiza en esa distancia, todas las opciones que tiene en su mano y que implican un cambio en todo sentido en la vida de esa familia. Pero se concentra en una sola cosa: LIBERTAD.
Verónica decidió pasar todo el mes de Enero, en la casa que tienen sus padres en Uruguay junto a sus hijos. Piensa disfrutar de su descanso ya que en Febrero debe retomar sus obligaciones laborales en el colegio. Mientras que Martín, debe enfrentar dos mes cargado de trabajo pero lejos de sus hijos y su mujer. Con previo acuerdo, prometió ir fin de semana de por medio a pasarlo con ellos. Sus vacaciones vendrán a finales de Febrero cuando de por cerrado un asunto laboral que lo tiene con la cabeza en muchos lados. Pero ante tanta obligación, tiene un objetivo que se transforma en una obsesión. Hacer de Enero, un remolino, corriendo tras el tiempo, sin que nada se le escape de sus manos y exprimiendo cada minuto de aquella libertad ficticia en la que gira su vida. Sin importarle nada, solo satisfacer su propio hambre procurando tapar con la mano, aquella herida que se volvió inmensa desde hace un tiempo, cuando la vida lo sacude con un cachetazo y abre los ojos para descubrir que todo su alrededor, no era tan perfecto como siempre lo había visto. Una grieta que aumenta, pero no puede ocultar, se apodera cada día un poco mas, envolviéndolo en aquella sed de algo que no lo lleva a ningún lado, mas que un circulo vicioso que lo trae de regreso a su propio interior.
Artista: Santiago Cruz Cancion: No nos digamos adios