Cada trabajador es libre de hacer huelga o no. Si la hace, el empresario le descontará el día de huelga de su sueldo. Si no la hace, pero por causas ajenas al trabajador (y también a la empresa) no puede trabajar (por problemas de transporte o por la coacción de piquetes) ¿qué se debe hacer? En ese caso, el empleado no tiene la culpa, pero el empresario tampoco. De hecho a éste le asiste el derecho a descontar el sueldo al empleado si éste, por la razón que sea, no acude al puesto de trabajo o lo abandona. La realidad es que muchos empresarios, entre los que me encuentro, no consideramos que eso sea justo, y vamos a seguir la politica de no descontar el sueldo a ningún empleado que quiera trabajar, dándole la oportunidad, en todo caso, de hacerlo o de recuperar el tiempo que haya perdido.