Después de limpiar los champiñones, los cortamos en lonchas finas y los doramos ligeramente en una sartén con 50 gr. de mantequilla, el diente de ajo, laurel y el brócoli hervido y seco.
Dejamos que cuezan unos 12 minutos y, cuando acaba la cocción, retiramos el ajo y el laurel, y repartimos los champiñones y el brócoli en cazuelitas de barro.
En una sartén doramos la mantequilla que nos ha quedado, o mejor ponemos un poco de aceite y freímos los huevos, rápido, de forma que la clara se cuaje bien y la yema quede poco hecha (semifrita). Colocamos un huevo en cada cazoleta, encima de los champiñones y el brócoli, y distribuimos el queso a tacos que hemos preparado.
Ponemos las cazoletas en el horno a una temperatura de 240º, de tres a cuatro minutos, de forma que se derrita el queso y cubra la clara del huevo.