Conexión a internet, 30€, coca cola para refrescarte durante la noche y mantenerte despierto, 1€, crema antiojeras para contrarrestrar el acostarme tarde, 3€, ir 20 arriba antes del descanso, robar un balón, y de repente escuchar pitidos del público de los Celtics a su propio equipo no tiene precio.
Esto de debió de ser lo que pensaron los aficionados de los Grizzlies anoche, al menos yo lo haría.
Vergonzosa, esa es la palabra que mejor describe el partido de ayer. Lo del primer cuarto ya fue demasiado tras perder el día anterior de forma más o menos justificada ante los Bucks, que acarreaban un gran racha de 8-1 antes de la victoria contra Celtics. El 27 - 12 del primer cuarto fue demoledor e iba a representar la tónica del partido hasta el pitido final, al que se quedaron a esperar el 10% del pabellón.
La derrota por 111 - 91 acabó por acabar con la paciencia de la afición, que entre silbidos y abucheos abandonó el Garden al principio del último cuarto en señal de protesta e impotencia.
Boston Celtics jamás logró hacer descender la desventaja de los 14 puntos y varias veces los Grizzlies se situaron +25 arriba, llegando a ir ganándo por +29 . Rudy Gay nos calzó 28 puntos, y otros 5 jugadores completaron dobles dígitos.
El juego interior de Boston deja mucho que desear aún, al igual que las aportaciones de banquillo o las rotaciones de Doc Rivers, quién si por mi fuera ésta seria su última temporada al mando de la franquicia de Massachusetts. A día de hoy, estos jugadores no se merecen vestir la camiseta que se enfundan cada noche a excepción de Rajon Rondo.
Un ritmo ofensivo bajísimo, de nuevo una defensa malísima con por ejemplo, 29 rebotes a nuestro favor por 48 suyos y un banquillo que salvo Michael Finley con 10 puntos en 14 puntos no merece atención alguna.
Lo mismo para el quinteto titular, quién salvo el mismo de siempre, Rondo, nadie merece ser nombrado. Paul Pierce muy irregular, con 14 puntos, Garnett sólo jugó 25 puntos, pero sigue pareciendo que esté cansado y muy bajo de forma, cerró el encuentro con 6 puntos y 7 rebotes. Kendrick Perkins sigue de bajón y ya es casi un mes la situación en la que está, no aporta lo que siempre daba, garra y defensa. Ahora todos se lo comen e incluso parecen O´Neals ante él, por poner un ejemplo Bogut ayer o Blatche en el anterior partido con los Wizards.
Nate Robinson ha dado un tremendo bajón, con 0 puntos, al igual que Marquis Daniels. Lo de Rasheed Wallace ya no tiene ni nombre, ¿para que llegar a las ayudas si puedo hacer falta no? anoche expulsado por cometer la sexta.
Luego está Doc Rivers, quién parece haberse quedado sin ideas para lograr desarrollar una plantilla tan profunda y buena cómo la que dota a los Celtics. Los roles en la banca parecen estar sin determinar aún a estas alturas y nadie pasa de los 17 minutos de juego, juegue bien o mal.
Sin duda, ya no se que pensar, ¿caeremos en primera ronda, nos repondremos para la postemporada cómo anticipo Rasheed Wallace o simplemente es el fin del BigThree? Quiero creer que aún podemos dar guerra y ganar a Cavaliers o Magic, logrando alcanzar de nuevo la final y completando ese banner que cuelga de las instalaciones de Waltham, el que sería el 18 para la franquicia, algo que sí, que podemos alcanzar, pero desde luego no con esta actitud.
Mañana partido contra a priori un rival fácil, los Indiana Pacers, nos la hará Danny Granger o será "Solomon Jones" quién haga definitivamente tambalearse y caer a este equipo.