Huracanes complicarían derrame crudo Haití

Publicado el 02 junio 2010 por Carloscolmenares

El dios caribeño del mal, Huracan, dio su nombre a la palabra “huracán”, y la temporada 2010 de huracanes que comenzó el martes está adquiriendo la forma de un monstruo maligno.

Los huracanes son temidos cada año por la destrucción que traen a la vida humana, propiedad, cultivos e industria desde el Caribe hasta la costa atlántica sudeste estadounidense y el Golfo de México. La temporada anual de huracanes comienza el 1 de junio y se extiende hasta el 30 de noviembre.

Sin embargo, este año los expertos temen destructivas tormentas que podrían crear un caos mayor en dos de los mayores desastres -uno natural y otro provocado por el hombre- que se hayan experimentado en el hemisferio occidental en los últimos años: el terremoto del 12 de febrero en Haití y el derrame de petróleo de seis semanas en un pozo de BP en el Golfo de México.

Año terribles

El riesgo de que los huracanes compliquen las catastróficas situaciones provocadas por estos dos desastres aumentó, ya que meteorólogos estadounidenses preven una temporada de huracanes extrema, con un número por sobre el promedio de tormentas poderosas.

“Parece que va a ser un año terrible”, dice el meteorólogo William Gray, quien fundó el respetado equipo investigador de tormentas de la Universidad Estatal de Colorado.

La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica pronosticó una de las temporadas más activas de las que se tenga registro, con 14 a 23 tormentas nombradas, de las que entre 8 a 14 se convertirían en huracanes, casi igualando al registro de 15 del 2005.

Además, de tres a siete de esos huracanes alcanzarían una categoría 3 o más, con vientos de más de 177 kilómetros por hora.