Es una máscara que define las pestañas y las protege. Aumenta hasta 4 veces su tamaño con una sola capa, por eso, es ideal para quienes tienen pestañas finitas.
Me encantó el cepillo con las cerdas bien separadas, que peinan y separan los pelos más rebeldes (en mi caso, viven apelotonándose).
Con tres capas quizás sea mucho para algunas, pero no para mi. Deja un efecto pestañas postizas que me encanta y lo bueno es que no se va descascarando a lo largo del día, dejando partes de máscara por la cara, ni tampoco mancha si somos de tocarnos mucho los ojos. El negro es bien intenso, aunque si quieren, hay una versión en marrón mucho más clara para una mirada más natural.
¿No se enamoraron como yo?