Me llamo Yopopolin, y estoy aquí porque soy adicto. Soy serieadicto, y estoy enganchado a las series americanas:
No tengo suficiente intentando descifrar los misterios de la isla de Lost, y por ello me meto de lleno en la frontera entre la ciencia y lo inexplicable de Fringe. He de admitir que seguí sin parpadear la fuga y persecución de Lincoln y Michael en Prison Break, al igual que me enganché a los más que adorables freaks de The big bang theory. Me metí entre pecho y espalda las cinco temporadas de las aventuras de la agente Sydney Bristow en Alias, y me reí a carcajadas con la famosa lista y el karma, en Me llamo Earl.
Si tuviera que someterme a cirugía estética, sin duda Troy/McNamara de Nip/Tuck son la mejor opción; y he de confesar que no me importaría morir a manos de un psicópata asesino, si tiene tanto arte como Dexter, al igual que Laura Palmer murió a manos de... otro psicópata, en Twin Peaks. Llamaría a la familia de Six feet under, para que me diesen un digno funeral, y lo celebraríamos a la americana con tartas y pasteles de "The pie hole", la pastelería de Pushing daisies. No descarto entrar a formar parte de un coro, desde que veo Glee, no sin antes descubrir qué puñetas vi en mi FlashForward! Si tuviera poderes como los chicos de Héroes, o tuviera cierta facilidad para desaparecer y reaparecer unos cuantos años después, como en Los 4400, todo sería más fácil. Por eso, para hacer mi vida más fácil, estoy enganchado a la hierba. Más que nunca. Estoy enganchado a Weeds.
Sí, porque después de toda esta parrafada que recopila algunas de las series americanas que he visto o sigo viendo, hoy os quería hablar de Weeds, por la que últimamente tengo obsesión, qué digo... devoción! porque me encanta! Vi las dos primeras temporadas hace meses, y ahora, en cuestión de cuatro días, he visto las tres últimas temporadas, y estoy esperando ya por la sexta. Qué genial es esta serie, qué humor tan negro y absurdo, qué difícil puede llegar a ponerse la vida, y qué de formas emplean los protagonistas para sacarla adelante... como imaginaréis, no de la mejor forma posible. ¿He dicho que es una comedia?
Trata de una mujer que se queda viuda, y para sacar a sus dos hijos adelante, comienza a traficar con marihuana, ¿no es genial? Aparecen en escena su cuñado, y otros personajes de lo más variopinto, como su amiga y a veces enemiga, Celia, que se mete poco a poco en ese mundo tan oscuro de Nancy, y termina peor que ella.
Destaco a la protagonista, Mary-Louise Parker, que con su cara de no haber roto un plato, lleva casi ella solita el peso de la tarma. Y a Elizabeth Perkins, que interpreta a Celia, el papel más rico de la serie, pasando por múltiples vicisitudes a lo largo de las temporadas, y componiendo un personaje difícil de olvidar.
Una serie muy recomendable. Os dejo con una imagen de la protagonista, una MILF en toda regla que nos atrapa en sus redes y no nos deja ir. El mundo de la droga es lo que tiene. Que engancha! Y yo lo estoy como nunca!