El conflicto nace por la intención de la empresa de que los pilotos de Iberia Express ganarán un 40% menos que los pilotos de IAG, en ese momento el Sepla consideró que eso les perjudicaba directamente.
Iberia ha conseguido que los representantes del 93% de la compañía, se sienten a negociar unas nuevas condiciones, mientras que el Sepla de momento se mantenía en al margen, explicando sus propuestas a los medios de comunicación, pero no directamente a la empresa.
El Sepla, según sus manifestaciones públicas, estaría dispuesto a disminuir los salarios de la plantilla actual en un 10% y hasta un 51% las incorporaciones de la nueva plantilla.
Veremos si son capaces de ponerse de acuerdo y zanjar estas disputas, que no hacen si no perjudicar a todos, los empleados y la compañía.
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