Imitando un antiguo grabado, realizado en plumilla sobre papel, José Manuel Barranca realiza en el 2009 esta representación de la Divina Pastora de Cantillana, propiedad de la familia Ruiz-Espinosa y que está cargada de simbolismo. Como principal protagonista la Imagen de la Virgen, el autor toma como modelo una fotografía de David Payan en la que aparece de cuerpo entero con la toca y el sombrero, el cayado de plata del siglo XVIII, diadema y rosario de plata y la gargantilla conocida como “la golondrina”. El Divino Cordero y la oveja alusiva a la iglesia triunfante acompañan a la Pastora, de fondo la escena de San Miguel defendiendo a una ovejuela de las garras del lobo; de fondo esbozado el simbólico rosal, y el Espíritu Santo derramando sus dones sobre la Virgen, hacen de este dibujo una completa representación iconográfica de la Pastora cantillanera.
Esta escena se posiciona sobre un fondo oscuro salpicado de estrellas y en sus cuatro ángulos se recortan el sol, la luna, el ciprés y la palmera, con ello el artista vincula la imagen con el Simpecado fundacional que se venera en la Parroquia y que tiene como ornamentación en plata estas alegorías marianas. A ambos lados, dos filacterias con dos frases: “¡Oh tú la más hermosa, sal y ve tras las huellas de tu rebaño!” y “Tú eres Tabernáculo de Dios y Puerta del Cielo”, dos frases que aparecen en las portadas de la calle Martin Rey y con las que pretende hacerle un guiño al momento culmen de la procesión triunfal de la Divina Pastora. En la parte inferior una cartela rota por el número 8, alusivo al día más grande del año, en la cartela se puede leer: “Vº Rº (verdadero retrato) de la Imagen de María Santísima Divina Pastora de las Almas que el pueblo de Cantillana aclama como Reina y Protectora, venerándola en su Iglesia Parroquial desde 1720”.