De las últimas pinturas realizadas por el pintor arundense Luis Orquín Domínguez, destaca esta pintura de grandes proporciones realizada al óleo sobre lienzo y que lucen orgullosos la familia Ruiz Espinosa en su domicilio.
El autor ha representado en esta ocasión a la venerada imagen de la Divina Pastora de Cantillana de cuerpo completo y acompañada tan solo del Cordero Divino, se muestra sin el sombrero y de frente, tal como la fotografio Albarran en 1950 y el pintor Juan Antonio Rodríguez la pintó tanto para la Ermita como para varias colecciones particulares.
Luce las características joyas del siglo XVIII, la diadema de oro que le regaló Dña. Pastora Solís Villalobos y el cayado de oro y piedras preciosas que le regaló el pueblo de Cantillana con motivo del III centenario de la devoción en el 2003. La imagen se enmarca dentro de una escena campestre en tonos ocres y verdes, con el Guadalquivir y la silueta del pueblo de Cantillana en el horizonte.