Ida

Publicado el 18 enero 2015 por Aleucine @aleucine

Duración: 1hora 22minutos

Productora: Caramel Films

Lo mejor: -Esa fotografía en blanco y negro es simplemente preciosa.

Lo peor: -Demasiados vacíos para una película que no llega a los 90 minutos.

Puede que esta sea la crítica polémica del 2015 (y acabamos de empezar el año, así que vístete que vienen curvas) pero personalmente no me gustó Ida.

Y es que por mucho que apeguen las luces de la cinta, la historia es más antigua que la pelea entre el color negro y el color blanco, la búsqueda de su identidad, de su pasado, y de sus padres (leches hasta Marcos hizo una serie entera buscando a su madre acompañado de un mono).

Lo más destacado puede ser esa batalla interna de nuestra monja judía entre sus creencias y la vida.

Después de esta entrada la mayoría de vosotros pensaréis que tengo menos sensibilidad que los pelos del culo de un manatí, y así puede ser, pero eso no quita que Ida se me haya hecho pesada, a la media hora de metraje todo el pescado estará vendido. La aparición de la tía (tía en sentido de parienta, no tía en plan vulgar) es todo un acierto, hará que nos volvamos a enganchar un poco más, y es que el contraste entre... palabras textuales "la puta y la santa" es fantástico.

Finalmente al terminar de ver la cinta saque una conclusión: si se ahorrarán los paseos vacíos, sin más que el sonido del viento y ese paseo entre caminos de árboles en blanco y negro (por cierto la fotografía es lo mejor de toda la cinta, un blanco y negro realmente bonito), se quedaría en un impresionante corto de 20 minutos, pero para un largometraje es excesivamente cargante, muchas escenas que no aportan absolutamente nada y hacen que acabes sucumbiendo al paraíso de los sueños (que también está en blanco y negro).

Toda la película se centra exclusivamente en este apartado, intentando a toda costa seducir y persuadir al espectador con una cruel historia entre dos mujeres, ambas perdidas por completo y con una misión que podrá y afectará en su futuro.

La carga emocional se diluye con el paso de los minutos de silencio, pocas escenas me llegaron directamente al corazón.

Mientras que me quito el sombrero con la batalla interior de ambas protagonistas, me impactó esa búsqueda de su ser, esa controversia y el final.

Sin embargo, de nuevo la película pierde fuelle a causa de su excesiva duración y del tiempo inútil que estamos perdiendo viendo la pantalla mientras nuestras descoloridas Thelma y Louise se pasean por toda Polonia sin nada que contarnos.

En rasgos generales Ida me defraudó bastante, esperaba una obra que me emocionará, o que por lo menos hiciera florecer algún sentimiento CONTINUADO en mi interior (3 escenas contadas durante 1 hora y una fotografía preciosa no es suficiente motivo) pero sin embargo el final me maravilló, tiene todo lo que esperaba de ella, es duro, emociona, tiene crueles giros del destino y VIDA mucha vida, tiene tanto significado, es un gran final.

Pero hay que comentar a la cinta polaca que no se puede dejar todo para el final, porque una gota de sabor no arregla una sopa insípida.

Para rematar el análisis, la más que posible ganadora al Oscar a mejor película de habla no inglesa no tiene mi barata admiración, me parece un cortometraje pesado de ver que hasta el tramo final no aporta nada nuevo ni significativo por lo que valga la pena ponerse a ver Ida, excepto una fotografía bonita.