Ideas para tener un buen día todos los días

Por Mayra Mayra G De Lucas @MundoPANGEA

¡Hoy puede ser un gran día!

Decía la canción, y es que la posibilidad de que hoy sea un día fabuloso está mucho más cerca y al alcance de lo que normalmente creemos. ¿Quieres tener un buen día todos los días?

De un tiempo a esta parte me he dado cuenta de que la respuesta a cómo tener un buen día todos los días depende principalmente de mi y de cómo decido tomarme las cosas que me pasan. Puedo volver a lamentarme del clima, del estrés, del trabajo (o la falta de él) o de la mala suerte día tras día o hacer algo YA para cambiarlo y empezar a ser feliz.

Darme cuenta de que en mi mano está la clave de cómo decido vivir cada día no sólo me ha hecho disfrutar más de las cosas que me pasan, sino hacer que me pasen más cosas que quiero y darle un valor especial a cada día. Y cuando siento que me flaquean las fuerzas y que estoy empezando a entrar en la espiral de la queja o el pesimismo, trato de repetirme algunas ideas y de ponerlas en práctica para que el día cambie 180º y sentir que de alguna manera ha sido un día genial.

Aquí tienes algunas ideas para tener un buen día:

No es necesario hacer grandes cosas todo el tiempo para disfrutar de la vida. De hecho creo que son los pequeños detalles los que hacen que la vida valga la pena. Un atardecer, unas risas en familia, pasear bajo el sol o mirar caer la lluvia por la ventana, tomar una rica infusión sola o en compañía, una conversación por teléfono o un simple mensaje. Todas esas cosas están ahí, esperando ser disfrutadas, sólo hay que darse el espacio suficiente para hacerlo.

Esa mañana lluviosa en que me he quedado dormida y ya voy con prisas, todo sale del revés, atasco en la carretera, los peques se pelean y no me ha dado tiempo ni a peinarme, me miro en un espejo y sólo me queda resoplar......... o darle la vuelta a la tortilla y enfocarme en algo positivo.

Detrás de los problemas pueden esconderse más problemas o algún que otro aprendizaje, todo depende de mi actitud ante la vida. Y es que un contratiempo puede ser una oportunidad para buscar una solución novedosa y hacer las cosas de manera diferente por un día.

Recuerdo un tiempo en que me pasaba la vida soñando con otra vida. "Algún día llegará el momento de (montar un huerto, aprender a hacer jabón, trabajar en lo que me gusta, escribir un blog, vivir de un modo más natural...)" pero no hacía nada para conseguirlo. Eran como sueños vagos e imposibles, y aunque me sentía frustrada por no alcanzarlos, no me movía en la dirección adecuada.

Cuando entendí que la vida que quería no me iba a llover del cielo si yo no hacía nada por construirla, fue cuando empecé a caminar en la dirección correcta y avanzar paso a paso, con valentía y seguridad, hacia mis sueños y disfrutar cada día con ello. No es una cuestión de tirarme a la piscina sin mirar primero, sino de tomar consciencia de lo que quiero e ir dando pasitos para estar más cerca.

Piénsalo, cuando te enamoras de alguien, los momentos con esa persona son especiales, te sientes bien a su lado y valoras sus gestos, sus palabras y la forma en que te trata. Y del mismo modo quieres cuidar a esa persona y hacerla sentir bien.

¿Y porqué no hacerlo conmigo misma? Al fin y al cabo, mi cuerpo, mis gestos, mis palabras, son las que me van a acompañar siempre, las que me va a hacer vivir de una manera o de otra. Decirme cosas bonitas, apreciar mis talentos, cuidarme, tener detalles conmigo misma, son cosas que pueden hacerme sentir bien y que hoy sea un gran día (y así cada día).

Empezar a practicar la gratitud en el día a día es uno de los mayores (y mejores) cambios que he hecho en mi vida, y sin duda una de las cosas que determinan que el día se cargue de buena energía. No me refiero a simplemente ser educada y dar las gracias, sino a sentir una verdadera gratitud ante la vida, ante el mundo que me rodea y ante todo lo que tengo a mi alrededor. Es un ejercicio de reflexión profunda y sincera, de ser consciente de la propia realidad y de todo lo bueno que hay en ella. Porque aun en los malos momentos, siempre puedo encontrar algo por lo que dar las gracias a la vida y veo cómo eso abre mi mente a nuevas posibilidades, a sentirme mejor cuando las cosas se tuercen.

Estas son sólo algunas ideas que verdaderamente a mi me sirven para dar un cambio en mi vida y hacer que cada día merezca la pena, pero seguramente tú conoces un montón más. No te las guardes y comparte ;)!!

¿Qué te parece? ¿Hoy puede ser un gran día?