Devorado la Identidad, de Fukuyama. Una reflexión de alto nivel sobre la identidad individual y sobre las identidades colectivas. Y sobre el problema que hay detrás del secesionismo: “Una democracia liberal es un contrato implícito entre los
ciudadanos y su gobierno, y entre los propios ciudadanos, según el cual
renuncian a ciertos derechos para que el gobierno proteja otros derechos más
básicos e importantes. La identidad nacional se construye en torno a la
legitimidad de este contrato; si los ciudadanos no creen que formen parte de la
misma comunidad política, el sistema no funcionará”