Nada más comenzar la Guerra, Japón intentó por dos veces tomar la ciudad china de Changsha (octubre 1939 y abril-junio de 1940). Desistieron ante el número de bajas que comportaba la operación.
Estados Unidos denunció en julio de 1939 el Tratado de Comercio y Navegación que había firmado con Japón en 1911. La denuncia entró en vigor en enero de 1940, ahora podía privar a Japón de mercancías estratégicas, de hecho en septiembre de 1940 se impuso a Japón un embargo parcial de chatarra y acero.
En julio de 1940 hubo un cambio de gobierno en Japón: Konoe Fumimaro encabezó un gabinete más agresivo. Konoe Fumimaro decidió acercarse a Alemania, las negociaciones culminaron en septiembre de 1940 con la firma del Pacto Tripartito (Alemania, Japón, Italia). Era un pacto contra Estados Unidos, el único país lo suficientemente fuerte para impedír esteexpansionismo. Los miembros más agresivos del gabinete de Konoe Fuminaron pensaban que la guerra no podía esperar ante el descenso de reservas de alimentos y petróleo.
Tras la caída de Francia, Japón dio un paso más en esta política y ocupó los territorios de la Indochina francesa (julio, 1941). Estados Unidos respondió cortando los envíos de petróleo y materiales estratégicos a Japón (vitales para la guerra) y congelando todos los activos japoneses en USA. Embargo similar hicieron los Holandeses. Los japoneses respondieron ocupando las Indias Orientales Holandesas.
Churchill ve urgente que Estados Unidos entre en la guerra, pero el presidente Roosevelt no se decide a intervenir y únicamente propone dirigir a Japón una advertencia conjunta y presionar para que devolviera Indochina.
Hitler, por su parte, quería la entrada del Japón en la Guerra para distraer a los EE.UU. y debilitar a Inglaterra. En abril de 1941 había prometido que declararía la guerra a los EE.UU. si lo hacía el Japón. El 29 de noviembre repitió la promesa que cumplió el 11 de diciembre.