Ii guerra mundial. operación barbarroja (ii): avance hacia leningrado, asedio y resistencia de la ciudad

Por Pedro

En el ataque a la URSS, como he indicado en una entrada anterior, el Grupo de Ejércitos del Norte debía marchar sobre Leningrado ocupando los Estados Bálticos, mientras las tropas alemanas de Noruega atacaban el Ártico ruso y los finlandeses Carelia. El ataque comenzó desde Prusia Oriental el día 22 de junio de 1941. Ver mapa adjunto.


Los blindados alemanes (a las ordenes de Von Manstein) avanzaron a toda velocidad. En cuatro días llegaron al río Dvina y el día 14 de julio cruzaron el río Luga. Las fuerzas rusas del Báltico se disolvieron ante el ataque. En los Países Bálticos, grupos nacionalistas recibieron a los alemanes como libertadores, pero cuando comprobaron que les trataban como a una raza inferior les retiraron su apoyo.

Como se ve en el mapa, un cuerpo de blindados se desvió de la ruta hacia Minks para proteger el avance del Grupo de Ejércitos del Centro. El resto del Grupo de Ejércitos del Norte se dirigió hacia Leningrado. El rápido avance de los blindados dejaron a la infantería muy rezagada. El 16 de agosto llegaron a Novgorod. No se aseguraron convenientemente las líneas de comunicación y abastecimiento, la falta de municiones y carburante provocó una cierta pausa entre finales de julio y finales de agosto. Los camiones tenían dificultades para avanzar por las malas carreteras sovieticas y los ferrocarriles debían ser reparados y adaptados al ancho de vía estándar europeo.

Por cierto, en el frente de Leningrado combatieron soldados españoles de la División Azul.

La toma de Leningrado era clave para el éxito de la invasión, para Hitler era la cuna del bolchevismo. El día 2 de septiembre la ciudad ya estaba a tiro de la artillería alemana. El plan alemán era tomar la ciudad desde el sur. Como, previsiblemente, tomar la ciudad supondría fuertes pérdidas propias, los alemanes decidieron sitiarla y rendirla por hambre y fuego. El 15 de septiembre, Leningrado estaba totalmente aislada, pero no cayó. Sus cinco millones de personas sufrieron un asedio que duró 872 días (desde el 8 de septiembre de 1941 al 27 de enero de 1944). Construyeron fortificaciones, trincheras y parapetos para impedir la entrada de las tropas nazis. Constantes ataques artilleros y bombardeos aéreos no lograron rendir la ciudad que se convirtió en un símbolo de resistencia.


Los sufrimientos y penalidades de la población de la ciudad fueron inmensos. La falta de alimentos hizo que se fuera imponeindo un racionamiento que fue reduciendo las cantidades hasta hacerlas irrisorias. Mascotas, ratas y ratones, suelas de zapatos, insectos, cortezas de abeto, pegamento de madera... pasaron a ser fuente de comida. Hubo tal hambre (muchos caían desfallecidos en plena calle) que se dieron casos de canibalismo a pesar de estar castigados con la pena de muerte.

"La Unión Soviética suprimió deliberadamente toda la información sobre el particular. Archivos de la policía secreta que han salido recientemente a la luz muestran que más de 1.400 personas fueron arrestadas acusadas de canibalismo y más de 300 ejecutadas". Declaraciones del historiador británico M. Jones a El País en 2008

El escaso abastecimiento se hacía a través del helado lago Ladoga sobre el que habilitó una pista para el transporte por camiones ("el camino de la vida" por el que también fueron evacuados varios miles de personas, especialmente niños).

Otro problema fueron las enfermedades que hacían estragos en unos cuerpos mal alimentados y que viviían en unas pésimas condiciones higiénicas, solamente el tifus provocaba 2000 muertes diarias.

Fueron igualmente importantes la falta de electricidad y combustible. Hubo grandes dificultades para aguantar temperaturas cercanas a 40 grados bajo cero sin calefacción (el invierno de 1941-42 fue el más duro del siglo).

A pesar de la angustia y la desesperación, los ciudadanos, dando muestras de gran civismo, trataron de mantener un cierto orden en la ciudad. A pesar de estas penosas condiciones, las importantes industrias pesadas de la Ciudad siguieron funcionando

Durante el asedio murieron más de 1,2 millones de personas (hambre, frío, bombardeos) y la mayoría de los edificios de la ciudad resultaron dañados. Fue "el sitio más sanguinario de la historia" (A. Roberts)

"La ciudad, con una parte de la población evacuada, quedó totalmente rodeada a partir del 8 de septiembre, a excepción de un pasillo por el lago Ladoga. Empezó entonces un asedio de novecientos días, que ninguno de los adversarios había previsto [...] Para aumentar el hambre de la guarnición, Hitler prohibió la salida de la población. El abastecimiento solamente llegaba por el agua, luego por el hielo del lago Ladoga y gracias a un camino de 200 km construido a toda prisa a través del bosque. En ninguna otra parte, la determinación y los sufrimientos de los soviéticos fueron sometidos a una prueba más penosa. [...] los sitiados comen pan amasado con 10% de celulosa, 10% de orujo, 2% de polvo de papel, 2% de polvo de harina, 3% de harina de maíz, 73 % de harina de centeno, y lo acompañan de salchichas a base de un 40% de harina de soja. En diciembre de 1941 hubo que enterrar más de 50.000 cadáveres. Los sitiados quemaban muebles y libros para fundir el hielo y obtener agua".

Henri Michel. La Segunda Guerra Mundial, l, Akal.