¿Imaginando una compañía para cambiar el mundo? Deje de hablar y póngase a trabajar .

Publicado el 14 octubre 2016 por Marketing News Marketing News @Marketingn

Es difícil dimensionar el impacto que Marc Randolph, un estadounidense de sonrisa cálida, pueda llegar a tener en la industria de la televisión, el cine y, en general, en la manera como millones de personas alrededor del mundo se entretienen. Algo más de 81 millones de personas, en 190 países del mundo, disfrutan de 125 millones de horas en series de televisión, documentales, telenovelas y películas al día en Netflix.

Esta plataforma cambió nuestra manera de “ver”, y acabó con la necesidad de ceñirnos a un horario o canal de televisión específicos para entretenernos. Ahora podemos disfrutar del contenido que queramos, a la hora que nos parezca, y sin importar dónde estemos, siempre y cuando tengamos un dispositivo con conexión a internet.

El impacto que Netflix y otras plataformas digitales recientes han tenido en la forma como se produce y comercializan los contenidos audiovisuales ya ha empezado a transformar la industria para siempre.

Aunque es conocido por dirigir Netflix durante más de 10 años, Marc Randolph ha estado involucrado, desde su nacimiento hasta su salida como CEO en 2004, en emprendimientos de toda índole, y ha fundado o cofundado más de 8 empresas. En la actualidad se dedica a invertir, asesorar y liderar, desde la junta directiva, emprendimientos de toda índole:

“De esta manera obtengo diversión intelectual y el desafío de sentarme en un cuarto con personas muy inteligentes a resolver problemas difíciles. Pero luego, me voy a casa a surfear y ellos son los que deben quedarse toda la noche trabajando en las soluciones”.

Randolph ha trabajado con empresas de todas las industrias; desde algunas que se dedican a los vestidos de baño y las pantalonetas, hasta otras involucradas en la renta digital de equipos pesados de construcción. De todo esto se entiende que el señor Marc puede tener idea de una que otra cosa en lo que significa emprender.

Para el momento en que surgió Netflix, Marc ya había iniciado 6 emprendimientos diferentes, aunque todos relacionados, de una u otra manera, con el naciente entorno digital de mediados de la década del 90. El plan original para el cual Reed Hastings, actual CEO de la compañía, invirtió 2 millones de dólares, tenía que ver con el alquiler de películas físicas por internet, una iniciativa que buscaba competir con el gigante de la época: Blockbuster, que, por entonces, era una empresa con un valor aproximado de 4.6 billones de dólares: “Cuando empezamos la empresa, entrar al top 5 de compañías de renta de video habría sido un éxito rotundo”.

No obstante, durante sus primeros años, el negoció no funcionó: “Por tres largos años, estuvimos fracasando una y otra vez, pero aprendimos a seguir adelante con el fracaso ¡Hasta mi familia en ese entonces pensaba que Netflix era una completa idiotez.” Pero perseveraron, ajustando constantemente su plan de negocios hasta que por fin dieron con la clave. A partir de entonces, empezó para ellos un proceso de crecimiento vertiginoso, que convirtió a su empresa en lo que es hoy en día, y que los llevó a destronar a Blockbuster, una empresa que, definitivamente, no supo identificar las tendencias del mercado.

Al preguntarle a Marc sobre las claves para emprender con éxito, fue reiterativo en destacar la necesidad de perseverar: “Cuando uno empieza una compañía, claramente no tiene ni idea de lo que va a pasar. Yo, por ejemplo, vivía concentrado en resistir una semana a la vez”. Los emprendedores deben ser personas con absoluta confianza en ellos mismos y con una alta tolerancia al riesgo y la inseguridad, por eso es necesario tener flexibilidad para ajustar los planes sobre la marcha según las realidades competitivas. Esto no es un proceso sencillo; normalmente se requieren varios intentos antes de encontrar la mejor manera de operar el negocio; “Si no te equivocas, significa que no te estás esforzando lo suficiente”, declaró convencido. En resumidas cuentas, concluyó que un emprendedor debe tener “una idea, aceptar el riesgo y creer en las posibilidades de sí mismo”.

Muchos han soñado con emprender. Tanto, que es muy común escuchar conversaciones entre amigos o familiares acerca de una fantástica idea de negocio que podría ser exitosa. Sin embargo, existe la percepción de que se necesita un paquete de habilidades especiales para poder iniciar y triunfar con un negocio propio. Para Marc, esta opinión no podría estar más alejada de la realidad. Pues, según él, iniciar un negocio exitoso implica únicamente que las personas “hagan algo, y dejen de pensar y escribir propuestas”. Después de todo, “cuando tienes una idea, es imposible saber si es buena o mala; tienes que hacer algo con ella para comprobarlo”. Es así como anima a las personas a darle una oportunidad a sus ideas, y a descubrir por ellos mismos si éstas se puede transformar en negocios exitosos. También nos recordó que una empresa siempre será una colaboración entre varias personas: “A la gente le gusta escuchar que Steve Jobs era el único que tomaba decisiones. Pero eso normalmente no es así; el emprendimiento es algo muy colaborativo, y en una mesa de trabajo nunca sabes quién ni cómo traerá una solución”, por lo cual es fundamental desarrollar habilidades de liderazgo que permitan fomentar y potenciar el trabajo en equipo y sacar lo mejor de cada persona.

Un problema recurrente al momento de emprender es encontrar fuentes de financiación que permitan iniciar o escalar la operación hasta hacerla viable. Los bancos suelen evitar préstamos a este tipo de actividades al considerarlas de alto riesgo; y los gobiernos, por su parte, tienen planes de financiación e incubación, pero con cupos limitados y, normalmente, con una alta dosis burocrática para acceder a los mismos. Esto hace de los inversores como Marc un elemento indispensable para empresas nacientes.

Al preguntarle por las características que busca al momento de considerar una inversión, destacó la importancia del emprendedor: “El 95 % de todo es el emprendedor. Hay muchas ideas y todas suenan geniales. La cuestión es saber qué tanto puede lograr con ellas”. Si algo le ha enseñado su experiencia, es que una idea puede mutar hasta encontrar la clave del éxito, pero es fundamental que exista una persona comprometida y dispuesta a trabajar hasta encontrar esa clave.

Actualmente, más de 3 billones de personas alrededor del mundo están conectadas a internet y, probablemente, esta cantidad aumente exponencialmente. Esto presenta oportunidades únicas, capaces de facilitar el comienzo de un negocio de escala global desde cualquier parte del mundo: “Hoy, en dos minutos, tienes todo subido a internet. Así que los negocios son fácilmente escalables. Si algo es bueno para 100 personas, llegar a 1000 más no será difícil, sobre todo cuando no requieren de alguna ubicación geográfica en especial”, declaró asombrado Marc. En últimas, lo que demostró es que lo importante para establecer un negocio es empezar.

Es imposible saber si usted tiene la idea del millón de dólares, a menos que se arriesgue, monte su empresa y trabaje hasta encontrar lo que debe hacer para hacerla funcionar. Marc no tenía idea de que iba a cambiar para siempre la forma como producimos, promocionamos, vemos y compartimos contenido audiovisual, pero se arriesgó, trabajó fuertemente, y hoy la empresa que ayudó a fundar y que dirigió por 10 años entretiene a 81 millones de personas al mes alrededor del mundo.

Fuentes de:

  • Díario ABC, España.
  • IE Business School, España.
  • Diario La Nación, Argentina.
  • CNBC, Estados Unidos.
  • InfoBae, Argentina.