Tener una cuenta de ahorro es un paso básico en la gestión financiera personal. Toda persona que tenga la intención de crear fondos debería tener una cuenta en una institución financiera que le permita acumular el dinero y, en cierta medida, estar visible al sistema.
Sin embargo, no todas las personas tienen una cuenta de ahorros a su nombre. De hecho, el 21% de los norteamericanos no tienen una cuenta de ahorros[1]. Existe un grupo de personas que entiende que esto no es necesario, o bien la han aperturado y no le dan el uso adecuado, no la alimentan o no hacen transacciones con en ella. Sin llegar a la conclusión de lo que representa tener este tipo de productos en la gestión financiera personal.
Es por esta razón que vamos a hablar sobre la importancia de la cuenta de ahorro en la gestión financiera personal. Resaltando las bondades de las mismas y cómo ellas pueden ser uno de los pilares para tener un buen desempeño en la administración del dinero.
Aunque parezca obvio, con frecuencia se nos acercan personas que no saben qué es una cuenta de ahorro, ni cómo funciona. Y como nuestra intención es aportar a la buena gestión del dinero, vamos a explicar en qué consiste este producto y cuáles son las funciones que tienen dentro del sistema financiero.
En ese sentido, las cuentas de ahorro son productos que te ofrecen los bancos, en los que puedes guardar tu dinero, recibir intereses establecidos por tu entidad bancaria y disponer de tus ahorros en cualquier momento mediante retiros en cualquiera de las sucursales de tu banco con libreta o tarjeta débito, de igual manera puedes hacer retiros con tu tarjeta débito en cajeros electrónicos[2].
Tomando esta definición como referencia, la cuenta de ahorro tiene tres funciones básicas:
- Guardar dinero.
- Recibir intereses sobre el saldo.
- Disponer de los ahorros acumulados.
Por lo tanto, es un instrumento que te permite crear un fondo del cual puedes disponer, por diferentes vías, y que genera beneficios. Esto último (beneficios) es importante aclarar que, dentro de todo el sistema financiero, representan la escala más baja, es decir, es uno de los productos que menos beneficios genera, a razón de la disponibilidad que tiene quien posee la cuenta, de acceder a ese dinero sin mayores restricciones.
Ya que el negocio de las instituciones financieras es comercializar con el dinero a través de la deuda, entonces con las cuentas de ahorro, no tiene, en teoría, la flexibilidad para comercializar con él. No obstante, en la práctica sí lo hacen, dado el volumen de dinero que manejan; además de que cuando entra al banco no entra a un espacio específico que dice tu nombre, sino a las bóvedas o cajas fuertes, en donde no hay distinción de a quién le pertenece tal o cual billete o moneda.
Lo único que debe garantizar dicha institución es que el dinero de las cuentas de ahorro esté disponible, y cómo ya se tiene un comportamiento de los movimientos de la clientela, entonces apartan una porción para responder a dichas solicitudes.
La cuenta de ahorro en la gestión financiera personal es de gran importancia. A razón de que sirve como un instrumento para administrar el ahorro y un sistema de control financiero. Vamos a desglosar estas dos razones para tener una panorámica más ampliada de cada uno de ellos.
Administrar el ahorro
En otras ocasiones hemos mencionado que ahorrar sin sentido es sinónimo de financiar la propia pobreza. Esto porque cuando se logra acumular cierta cantidad es "Mucho para gastar e insuficiente para lo que realmente quiero". Por lo tanto, el ahorro es para cualquier cosa y para ninguna a la vez. Es por esto que sugerimos que te plantees objetivos para tus ahorros. Que los etiquetes de manera que sepas para qué es tal o cual dinero.
En ese tenor abrir una cuenta de ahorro te permite hacer esa clasificación. Puedes abrir tantas cuentas de ahorros como entiendas correcto. Aunque te sugerimos que tengas dos de instituciones diferentes, y que lleves los registros de tus ahorros para que tengas todo organizado.
A todo esto una cuenta de ahorro te permite crear sistemas de administración de dinero. Para pagar parte importante de los servicios básicos, como electricidad, teléfono, internet, servicio de cable, etc. Y lo puedes hacer de manera automática, y sin la necesidad de tener una tarjeta de crédito.
De igual forma puedes automatizar la debitación o derivación de tus recursos a cuentas específicas las cuales están destinadas para un objetivo determinado, como por ejemplo, si tienes hijos(as) puedes establecer que cada ciertos días se transfieran a una de sus cuentas y no tengas que ir físicamente a la institución bancaria para hacer el retiro y luego depositar. De igual forma, si tienes algún préstamo, puedes solicitar que te debiten la cuota mensual para saldar dicho monto.
Por lo que una cuenta de ahorro no solo es un depositario de tu dinero, sino que puede ser un aliado estratégico para las diferentes obligaciones, gracias a la tecnología existente en la actualidad con el internet banking ofrecido por las instituciones financieras, las cuales te permiten organizar y orquestar los diferentes movimientos de dinero que tengas que hacer.
Sistema de control
Los seres humanos somos conductuales. Adoptamos rutinas y formas que nos permiten funcionar en esta sociedad. En ese sentido la cuenta de ahorro genera, en la conducta humana, dos elementos primarios, la capacidad de la disciplina y, en cierta medida, restricción para usar el dinero que hemos acumulado.
Son pocas las personas que desperdician el dinero acumulado en su cuenta de ahorro. En esencia, cuando una persona logra apartar para un fondo, lo aprecia y valora. Es por esto que cuando aperturas una cuenta de ahorro, estás mentalizándote para tener una buena gestión.
Al mismo tiempo, que te permite tener un registro, digamos natural, de tus transacciones, ya que si te auxilias del internet banking y haces movimientos tanto de ingresos como egresos, se va generando una historia en donde puedes ver cómo se comporta tu cuenta a través del tiempo.
Tener una cuenta de ahorro es una movida inteligente. Primero por los diferentes beneficios que te permite, luego de crear un fondo relevante, sin la necesidad de acceder a deudas para solventar tus diferentes compromisos financieros. Y más específicamente en la administración y sistema de control de tu dinero.
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[1] Artículo Most Americans have less than $1,000 in savings ( La mayoría de los Americanos tienen menos de $1,000 en ahorros) Consultado 06/05/16
[2] Artículo ¿Qué es una cuenta de ahorros? consultado 06/04/16