Impresión en 4D

Publicado el 24 diciembre 2014 por Antonio Fernández Reyes @tonyfdezryes

Hoy en día la impresión en 3D no solo se encuentra en la industria sino en los hogares, ya que el precio de las impresoras en 3D ha bajado considerablemente. Pero hay más que se puede hacer con materiales impresos en 3D para hacerlos más flexibles y más útiles: estructuras que se pueden transformar de una manera pre-programada en respuesta a un estímulo. Recientemente recibió el nombre popular de la "impresión 4D", tal vez una mejor forma de verlo es pensar que el objeto se transforma con el tiempo.
Este tipo de deformaciones estructurales no son nuevos - los investigadores ya han demostrado propiedades de “memoria de materiales inteligentes". Una de las tecnologías más populares se conoce como aleación con memoria de forma, cuando el cambio de temperatura provoca un cambio de forma. Otros enfoques exitosos (en el campo de la medicina, por ejempo) usan polímeros electroactivos, fluidos presurizados o gases, estímulos químicos e incluso una respuesta a la luz.
Básicamente se trata de crear objetos inteligentes gracias a una impresora 3D tradicional. Es decir, el secreto de la impresión 4D no es la impresora, sino el material con que se imprime. Los científicos lograron formular un material sintético capaz de ser programado para cambiar de forma al pasar de un ambiente a otro.
En principio se trata de diseños tridimensionales hechos en un material que fue programado para cambiar de forma al ser mojado con agua. Por ejemplo, se puede crear una simple plancha rectangular que al ser sumergida en agua se transforme en una caja, o se pueden crear cañerías plásticas "programadas" para expandirse en función del caudal de agua o repararse a sí mismas si se rompen.