Llevaba no sé cuánto tiempo decidiéndome en comprar una impresora comestible. Lo pensé durante un año y creo que en ese tiempo hasta bajaron de precio porque la última vez que pregunté por una costaba 200 euros y algo más, esta costó un poco menos. Así que el capricho y la envidia de ver tantas cosas chulas de impresión comestible rodando por la red, pudieron más que mi buen juicio y arrastraron en ello a mi bolsillo y, ¡hala, ya tengo mi impresora de tinta comestible! ¡Ahora también podré comerme todo lo que escriba!
Luego de unas cuantas horas conectando e instalando el trasto, me puse a investigar de qué iba la cosa antes de ponerme manos a la obra, porque ni idea de cómo tenía que usar el papel de azúcar. La única y última experiencia parecida fue con un papel de arroz para una tarta que me dio muchos quebraderos de cabeza y frustración, hasta el punto de que tuve que rehacer la tarta y el papel de arroz fue directo a la basura, por lo cual mi timidez al respecto estaba justificada.
Y esto es lo que encontré entre todo lo que leí:
- La tinta comestible no es más que colorante vegetal o colorante natural que se puede comer.
- Es aconsejable no usar nunca cartuchos de tinta no comestible en la impresora en la que imprimirá las impresiones comestibles.
- Esta impresora debe ser sólo para las impresiones comestible y usar otra para impresiones con cartuchos y papel, no comestible.
- No se debe imprimir con las hojas secas o frágiles. Las que estén secas se pueden humedecer colocándolas dentro de una bolsa plástica con cierre dentro de la nevera o poniéndolas sobre una cacerola de agua hirviendo.
- Sellado en su bolsa el papel de azúcar se mantiene fresco hasta un año, mientras se tenga en un ambiente con poca humedad.
- Es recomendable usar el papel comestible dentro del primer año.
- Papel de arroz: también conocido como papel de oblea, utilizado para decorar productos de confitería como son las galletas y pasteles. Aunque lleve ese nombre no está hecho de arroz, sino de una combinación de agua, almidón de papa y aceite vegetal. El papel de arroz es muy delgado, translúcido y puedes dibujar en él con lápices para colorear alimentos o usar una impresora con tinta comestible. Se puede usar para pegar, según he leído en distintos sitios en la red, con clara de huevo, glasé, crema de mantequilla, gelatina neutra en frío, mermelada, dulce de leche, según he leído en distintos blog, y sellar los bordes con glasé o crema de mantequilla ayudándote de una boquilla, sobre crema de mantequilla o fondant, pero les diré una cosa, yo la pasé fatal una vez y no hubo Dios, que hiciera pegar aquellos bordes, recuerdo haber pegado la oblea con almíbar porque así leí en un tutorial en internet. ¡Fracaso total! Quizás a vosotras le vaya mejor.- Papel de azúcar: está hecha con capas de glasé presionadas sobre una lámina de plástico de tamaño A4, la lámina no se debe retirar antes de imprimir porque esta ayuda a sujetar la hoja durante la impresión. Una vez impresa, retirar el plástico y pegar. Yo utilice jarabe de maíz Karo, pero también se utiliza gelatina neutra en frío. En mi caso quedó perfecta con el jarabe de maíz, no hubo decepciones. Las hojas de azúcar son las más utilizadas para imprimir. Se puede usar sobre crema, galletas, fondant. Conservarla lejos de la luz y lugares húmedos. Una vez impresas, es importante que se utilicen de inmediato ya que se secan y después no hay forma de despegarlas del plástico sin que se rompa. Pero yo tardé dos días en pegarla una vez impresa pero las mantuve en la nevera dentro de una bolsa plástica con cierre hermético y se despegó divinamente. El Papel de Azúcar es muy flexible lo que permite manipularlo con facilidad.
Jarabe de Maíz Karo, valerse de una brochita o pincel, según el tamaño de la impresión para untarlo. No sobrepasarse porque una vez puesta la impresión puede gotear el jarabe.
Cartuchos de tinta comestible.
El piso de arriba está forrado con papel de azúcar comestible, impreso con tinta comestible vegetal. El piso de abajo de fondant. Por cierto las flores son de estreno, unos moldes de silicona que compré hace poco, ¡me encantan!
Una vez sabido todo esto, estaba lista y desesperada por probar mi impresora así que imprimí una copia del papel de fondo, del blog y una etiqueta con el nombre Lulu’s Kitchen. Hice una tarta falsa de porexpan, para darme el gustazo (y así ensayaba un poco antes de ponerme en serio) y de paso mostrarles lo guapa y mona, que puede quedar una tarta o galleta con papel comestible.
Ya me dirán ustedes, y espero que mi pequeña investigación sobre la impresión comestible les ayude en el futuro animándolas a volverse tan locas como yo, e ir corriendo a comprarse una impresora de tinta comestible.
Enlaces del sitio donde la compré, lo hago por solidaridad y facilitarles el camino a vosotras, no me dan comisión por esto jejejeje...
Dulce Impresión (Es la empresa que suministra en Madrid, los productos de Cohesa)Suministros Cohesa (Se en encuentra en España, Canarias)