Will Salas (Justin Timberlake) es un trabajador de la zona horaria 12, la zona más deprimida de la ciudad, que está acostumbrado a vivir al límite con unas pocas horas de margen cada día. Cuando su madre muere, un desconocido le revela que hay gente que tiene miles o incluso millones de años acumulados en sus relojes, pero para llegar a esto, muchos de los pobres deben morir para mantener el equilibrio. Desde este momento la vida de Will se centra en robar todo el tiempo posible y repartirlo entre los necesitados ya que nadie debería ser inmortal si para ello muchos deben morir.
Partiendo de una idea bastante buena, Andrew Niccol, responsable de una de las grandes cintas de la ciencia ficción como es “Gattaca”, nos ofrece una película que podría haber sido mucho mucho mejor pero que por momentos se pierde haciendo que dejes de interesarte por la historia. Los actores no están mal, no he escuchado la música de Justin Timberlake aunque supongo que no me iba a gustar, pero como actor el tío cumple de forma solvente, así como Cillian Murphy en su papel de minutario (pero claro, con esa cara de malo, es fácil ser el malo de una peli).
En algunos momentos me recordaba a “La Isla”, en otros a “Un Mundo Feliz”, pero sobre todo la idea de “los relojes” que llevan los personajes me recordó mucho al videoclip de “Savin Me” de Nickelback. En fin, como ya digo, la peli podría haber sido mucho más de lo que es, pero para estas fechas cumple como película entretenida
Ahí va el trailer
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