Iñaki Urdangarín. (I) Los contratos “confidenciales” de Camps.

Publicado el 18 noviembre 2010 por Santiagomiro

Iñaki Urdangarín.


Iñaki Urdangarín y la infanta Cristina de Borbón.


El Instituto Nóos, una entidad dedicada al marketing deportivo presidida por Iñaki Urdangarín, yerno del Rey, cobró, en 2005, más de tres millones de euros de la Generalitat a cambio de su mediación. IU asegura incluso que Francisco Camps pagó más de 5,5 millones a la empresa de Urdangarín. El caso es que Camps recurrió a la empresa pública CACSA –Ciudad de las Artes y las Ciencias S. A.– para suscribir un contrato con el Instituto Nóos cuyo objetivo era la “preparación de la candidatura de la Comunidad Valenciana como sede de la primera edición de los Juegos Europeos”. El proyecto –dijo el duque de Palma– “supondrá la integración de Europa a través del deporte. La celebración de unos Juegos Europeos en Valencia era para Urdangarín “un reto personal que me voy a tomar con el máximo interés”. Pero el esposo de la infanta Cristina de Borbón, ex jugador de balonmano y ex vicepresidente del Comité Olímpico Español, se embolsó esos millones “a cambio de nada” pues la competición deportiva nunca llegó a celebrarse. Y, seis meses después, abandonaba la presidencia del Instituto Nóos, al ser contratado por César Alierta, presidente de Telefónica, como consejero de la filial Telefónica Internacional.
Desde entonces, Uñaki Urdangarín vive en Washington con su esposa y sus cuatro hijos, como consejero de Telefónica Latinoamérica. Y se desentendió de su compromiso con Camps, lo que enfureció al presidente de la Generalitat, que expresó, en privado, su profundo malestar a algunos de sus más estrechos colaboradores. La renuncia de Urdangarín se produjo justo después de que “Palma-Arena” salpicase al propio yerno del Rey, al trascender que el entonces presidente de Baleares, Jaume Matas, le había pagado por la organización de un foro internacional en Palma de Mallorca sobre deporte y turismo. El juez instructor del caso, José Castro, reclamó al Instituto Nóos que acreditase documentalmente “haber rendido cuentas de los fondos recibidos”. Jaume Matas, ex presidente, no supo contestar al juez con exactitud por qué el Govern había pagado por unas jornadas 1,2 millones de euros al Instituto Nóos, una organización sin ánimo de lucro, que preside el duque de Palma.
Tras la salida de Urdangarín del Instituto Nóos y la paralización de la candidatura de los Juegos Europeos, el Grupo Parlamentario Socialista en el Parlamento valenciano preguntó por escrito al Ejecutivo de Camps todos los detalles del contrato firmado por CACSA y la entidad presidida por el duque de Palma. Pero el presidente de la Generalitat se escudó en que se trataba de un “contrato confidencial” y el Gobierno autonómico se negó a facilitar información al PSOE, argumentando que si lo hiciera “vulneraría lo acordado con el proveedor del servicio”. Dos años después, los socialistas volvieron a preguntar a Camps por el proyecto que éste encargara a Urdangarín. La escueta respuesta por escrito de Trinidad Miró, consellera de Cultura y Deportes de la Generalitat del Gobierno regional, el 25 de noviembre de 2008, decía: “El proyecto de Juegos Europeos fue tratado en comité en el seno de la 37ª Asamblea General de los comités olímpicos europeos celebrada en noviembre de 2007, y después de un debate por parte de todos los comités representados en dicha reunión, fue desestimada su puesta en marcha”.
Mañana: (y II) Negocios que molestan en la Casa Real.