El trofeo lo espera. Con lo justo y sufriendo hasta el ultimo segundo, Independiente venció 2-1 a La Liga de Quito y se clasificó para la gran final de la Copa Sudamericana.
Quince años después, el “Rojo” volverá a disputar el encuentro decisivo de un torneo continental y en ello, mucho tiene que ver Antonio Mohamed. El “Turco” ha sido el gran artífice. Llegó tras alejarse de Colon y en menos tiempo del esperado, encauzó anímicamente a un plantel desahuciado.
Para Independiente, el encuentro no fue sencillo. Liga, acusado por el calendario y las lesiones, no se dejó amedrentar ni por el marco (40.000 espectadores) ni por el inicio entusiasta de su rival. Mantuvo el orden y la compostura.
Con Martín Gómez en lugar de Fernando Godoy, el “Rojo” llevó la iniciativa. No obstante y lejos de prosperar con el balón por el suelo, solo acercó peligro a través de las pelotas paradas.
Lo perdió Galeano a los 13 y minutos después, para la Liga respondió Chila, quien tras una gran escalada por la zona central, elevó su remate por encima del travesaño.
Cuando al local todo parecía costarle demasiado, llegó el primer gol. Galeno, libre de marca, se encontró con el balón volando por los aires y de cabeza la mandó al segundo palo para la entrada de Parra. El delantero solo tuvo que empujarla para desatar el primer gran grito.
Suelto Gómez, activo Cabrera y siempre amenazantes Silvera y Parra, el once de Mohamed tomó confianza y hasta dispuso de un par de ocasiones para aumentar la ventaja. La más clara, en poder del propio Parra, quien tras un centro atrás y con Cevallos vencido, no pudo empujarla. Silvera corrió con la misma suerte.
Con Independiente más cerca del segundo, nada hacia prever la igualdad visitante, sin embargo la misma acabó llegando al filo del descanso. Tras recibir de Barcos, el uruguayo Salgueiro sacudió desde afuera y como en Quito, volvió a vencer la resistencia de Navarro. 1-1 y 45 minutos por jugar.
El gol de Fredes –propiciado por un error imperdonable de Urrutia- ni bien comenzó la segunda parte, fue un alivio para Independiente. Trajo tranquilidad y el once de Mohamed pudo jugar con la desesperación de su rival.
Liga, al que el resultado ya no le servia, fue en busca de la igualdad. Adelantó líneas, presionó y con mayor continuidad que en los 45 iniciales, merodeó las inmediaciones del área de Navarro.
De pronto, el duelo se transformó en un constante ida y vuelta, en el que ambos equipos dispusieron de ocasiones para marcar. A falta de siete minutos, el ingresado Enrique Gamez estrelló su disparo en el travesaño y por un instante, los corazones de los miles de fanáticos de Independiente se paralizaron. Fue solo un susto.
Osses marcó el final y la locura se desató. Independiente dejará de vivir de recuerdos y volverá a disputar una finalísima continental –su ultimo titulo lo consiguió en 1995, al levantar la ya desaparecida Supercopa luego de vencer en la definición al Flamengo-. Eliminó a un gran rival y ahora lo espera Goias.
Los goles del encuentro:
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure